PANKO se plantea entre un grupito de amigos "locos por el pan" que se propusieron traer este alimento al centro de Bilbao de una forma distinta. "Nuestro propósito no era solo abrir un local donde la gente pudiera venir a comprar pan artesanal, de calidad y con mucha variedad, sino que vivieran la experiencia del pan junto a la posibilidad de desayunar, tomar buen vino y acompañarlo con platos variados", cuenta el cocinero Paco García, responsable de que el pan de Panko maride con todo en perfecta armonía.
"Panko es mucho más que una panadería, es un espacio polivalente para comprar, degustar y compartir, en el que la base de todo es el pan, esa es su esencia. Desde las tostadas de la mañana, los pintxos del mediodía, los sandwiches de la tarde y toda la carta de recetas que tenemos disponible, el pan es el protagonista indiscutible", comenta.
Con la ayuda inestimable del cocinero Aitor Elizegi, artífice de la idea, y con la complicidad de Saturio Hornillos, que regenta la Tahona Bikiak de Lekeitio, se vio realizado un proyecto que el pasado 13 de abril cumplía un año de andadura. "El balance de este primer año es muy positivo y nos mantiene dinámicos pensando ya en el año que viene, sin despistarnos, porque la verdad es que las cosas se están poniendo muy difíciles económicamente hablando", valora Dani García, encargado del establecimiento ubicado en la bilbaina calle Marqués del Puerto-4, muy cerca de Diputación. Después de un año conocemos mejor lo que la gente demanda y estudiamos introducir una nueva oferta en nuestra carta".
Panko es un local de líneas y materiales suaves en lo decorativo, de aromas que despiertan el recuerdo casero del pan y del café, y habitado por un ambiente cálido, amable y distendido, ese que emana de quienes disfrutan de un momento de ocio, de una reunión entre amigos o de un merecido descanso en el trabajo. A Panko acude quien busca un pan especial, un pan de calidad, o un pan básico de molde u hogaza pero, además de eso, la gente se encuentra con un espacio para tomar café, celebrar con cava ecológico, degustar una selecta variedad de cervezas Damm o acompañar las recetas Panko con cerca de 40 excelentes vinos tintos, rosados, blancos o dulces.
Los clientes se reúnen entre tablas de pintxos, Pankosalad de mar, tierra verde o mixta; guacamole con pan de maíz; cestos de tostadas varias, cremas, croquetas, tablas de quesos y ahumados, de foie y brioches, Pankopizzas o Panko@burguer. Se endulzan el día con panettone de chocolate y helado de naranja, torrijas caramelizadas con helado de leche quemada; mazapán de jugo de almendra verde y helado de levadura, o carpacio de frutas de temporada con migas de naranja y helado de pan de centeno. Sin duda, una miscelánea de texturas, colores y sabores en torno a la masa madre.
"Este establecimiento se diferencia de un bar común porque es una panadería, un café, un bar y un restaurante al mismo tiempo", comenta su encargado. Y la esencia de todo este espacio está en el pan de Saturio. "Es un pan hecho en Lekeitio con mucho cariño, de forma tradicional y artesanal, en horno de leña y con masa madre. Es lo mejor que se puede probar en pan", afirma Dani. "Es un pan que aguanta varios días, que compensa, porque no se tira de un día para otro. Lo pagas y lo puedes aprovechar muy bien".
Entre las variedades que ofrece Panko está el pan de centeno, de maíz, de diez cereales, de espelta, de avena y trigo integral, bocachas, pan italiano, brioche, pan de molde, pan de pipas y miel, de nueces y pasas, de naranja, las variedades son infinitas. Sin embargo, la inquietud de Aitor Elizegi hizo que Saturio Hornillos empezara a introducirse en el pan de autor. "El objetivo era dar más sentido al pan y aumentar la oferta en restaurantes. Ahora mismo contamos con pan de vizcaina, pan de pesto, pan de olivas, e incluso un pan de tinta de txipiron que ya se está probando", señala Paco García. "Porque un pan picante, por ejemplo, siempre le dará mucha más chispa a un plato de pescado".
Desayunos En Panko se puede desayunar de forma ligera entre las ocho y las doce con una tostada de mantequilla y mermelada; tostada de aceite de oliva y tomate, bollería o pintxo de tortilla, más café o té, por solo 2,60 euros. Si se busca algo más vitaminado añádale un zumo de naranja recién exprimido (3,60 euros) o si se prefiere un desayuno más sólido opte por un café o té con bocadillo de jamón y queso con mostaza y sésamo por solo 3 euros.
Es entre las 11.00h. y las 14.00h. cuando el Panko Brunch alegra muchos estómagos. Se trata de una original oferta, que a modo de desayuno fuerte o almuerzo (18 euros), pone sobre la mesa una selección de zumos naturales, con café o infusión, brioche con mantequilla y mermelada, pan tomate y oliva virgen, una selección de sandwiches con ensalada, huevos rotos y patata confitada, y rematado con un bio espuma de yogurt con frutas frescas. "Vemos que mucha gente que viene de paso por la ciudad demanda este tipo de oferta gastronómica, porque un buen desayuno les permite aguantar de turismo hasta la hora de tomar la cena y ha tenido muy buena aceptación, sobre todo en fin de semana", explica Dani.
Begoña Astigarraga
Ingredientes:
3 bandas de pan de tramezzini
Mahonesa
Lechuga fresca del país
Tomate rallado
Tabasco
Jamón cocido de calidad
Queso Havarti
Maíz tostado
Olivas negras secas
Primera capa:
Untamos una banda de pan con el tomate rallado y aliñado con aceite, sal, ajo y tabasco Ponemos encima del pan la lechuga del país lavada y cortada a mano en grandes trozos y aliñamos con vinagreta de modena
Segunda capa:
Untamos una banda de pan con mahonesa y colocaremos hasta cubrir el pan sin salirse una capa de jamón cocido y queso
Sobreponemos esta capa encima de la primera
Tercera capa:
Untamos la banda restante con mahonesa y le espolvoreamos un muesli de maíz y olivas negras que previamente habremos deshidratado y triturado en molinillo.
Sobreponer esta última capa con el muesli hacia arriba, cortar la ración que se desee y servir.
