HA pasado exactamenteun siglo desde que elTitanic rozase un icebergcuando había recorridoya 2.335 kilómetros de la travesíaque debía unir la localidadirlandesa de Queenstown y NuevaYork. Esa colisión con una columnade hielo de unos 30 metros de alturasignificó el comienzo del fin deeste barco y de 1.512 de sus ocupantesy, a su vez, el inicio de una leyenda.La exposición R. M. S. Titanic.Cómo se fabricó y por qué se hundió,que estará hasta el próximo 13 deenero en elMuseo Marítimo, analizatoda la historia de este barco quepasa por ser el más famoso de la historia,desde su construcción hastalas consecuencias que tuvo su accidentey las medidas que se tomarontras su hundimiento.
Jon Ruigómez, director generaldel Museo Marítimo, remarcó queesta muestra organizada con motivodel 30 aniversario de la Escuelade Administración Marítima delPaís Vasco es “espectacular, didácticay rigurosa”. Todas estas cualidadesse las aportan las fotos ydocumentos que forman parte deella. “Alguno de los documentos esla primera vez que se exhiben”,explicó José Antonio Reyero, coordinadorde la muestra y que cuentacon más de 40 años experienciaen el mundo de la construcciónnaval. Las fotografías provienen delMuseum Northern Ireland de Belfast,mientras que los documentospertenecen al astillero Harland andWolff, donde fue construido estebarco. “Son instantáneas que describende forma muy certera cómose construyó este barco”, señalóReyero.
FOTOS NUNCA VISTAS Las fotografíasy documentos ayudan a contarla historia de este emblema del mara lo largo de paneles en los que serepasan y descubren al visitanteaspectos como las razones por lasque se hundió el barco o las medidasque se tomaron tras la tragedia.“Gracias a esta tragedia, la comunidadmarítima internacional sepuso las pilas para evitar que la tragediase repitiese”, aportó el coordinadorde la exposición y tambiénautor del libro R. M. S. Titanic. Lasverdaderas razones de su hundimiento.
Asimismo, la muestra descubrecuál fue el talón de Aquiles de unaembarcación tan moderna como loera el Titanic para su época. Y esque un elemento tan poco lustrosocomo los remaches fueron la clavede que “tardase tan poco en hundirse”.La baja calidad de estosremates hizo que se doblasen alrozar con el iceberg y se desencadenasela tragedia que marcó unantes y un después en la vida marítima.“Esos remaches no hubiesenEl Museo Marítimo acoge hasta el mes de enero una muestra que repasa el hundimiento del barcopasado una inspección independiente”,aseguró Reyero.
Asimismo, el coordinador aseguraque la muestra concluye “con lavisión positiva de que esta tragediasirvió para la evolución de la seguridadde los barcos”.Al fin y al cabo,sirvió para que no haya catástrofescomo la del Titanic, cuyas víctimasfueron recordadas en la tarde deayer con un pequeño concierto coral.