Zamudio recupera la capilla del cementerio
w Todas las obras de rehabilitación han sido acometidas por los trabajadores de la brigada municipal w El pequeño templo ha sido equipado con otro altar y ya está operativo de cara a Todos los Santos
Zamudio. Se acerca el día de Todos los Santos y los municipios preparan sus cementerios ante estas fechas en las que los vecinos acuden para recordar y honrar a sus seres queridos fallecidos. En este contexto, la localidad de Zamudio ha acometido una destacada obra para rehabilitar la capilla del camposanto. Pero el dato más curioso de esta intervención es que ha sido realizada por los trabajadores de la brigada de obras municipal. Esta infraestructura se encontraba bastante dañada debido a la humedad y al paso del tiempo. Con apenas 50 m2 de superficie, este pequeño templo cuenta con tres espacios. Uno es la capilla propiamente dicha, la zona dedicada al culto. Y los otros dos, la sala de autopsias y la cámara frigorífica, dos estancias que se utilizaban antaño, cuando los protocolos funerarios no tenían nada que ver con los establecidos hoy día.
La cuestión es que en algunas zonas de estas estancias se había derruido el falso techo, en las paredes se habían formado grietas y la fachada se hallaba bastante estropeada. "Lo que se ha hecho es adecentar la fachada y las paredes, arreglando las grietas, pintándolas y luciéndolas. También se han arreglado los falsos techos medio derruidos", explicó Iñaki Atxutegi, concejal de Cultura y Comunicación del Ayuntamiento de Zamudio. Este edil pone en valor, sobre todo, el hecho de que esta intervención haya sido llevada a cabo por los empleados municipales, conocedores de las artes de la albañilería. "A veces trabajaban en esta obra unos, y a veces otros. Los efectivos iban turnándose dependiendo del tiempo que les dejaba el atender el día a día del municipio", afirmó Atxutegi. Debido a que la obra se ha ido acometiendo a turnos y en los ratos en que les era posible a los operarios dentro de su quehacer diario, la obra se ha prolongado durante un par de semanas. "Pero la capilla ya está operativa y los vecinos, cuando acudan al cementerio de cara a Todos los Santos, podrán visitarla y ver cómo ha quedado", afirma este edil.
Un nuevo altar Esta intervención en la capilla también ha supuesto un cambio en su mobiliario, de manera que ahora cuenta con un nuevo altar. "Había uno en el pabellón municipal; un altar que no sabemos exactamente de dónde procede, pero que se ha aprovechado para colocarlo en la capilla", explica Atxutegi.
La cuestión es que toda esta reforma se ha llevado a cabo sin cargo alguno para las arcas municipales. "No hay un presupuesto que se haya gastado en esta intervención. En lugar de contratar una empresa, la ha llevado a cabo la brigada de obras municipal. Además el material utilizado es el que habitualmente tiene un ayuntamiento para sus obras y labores de mantenimiento", concluyó Atxutegi.