¿Qué va a suponer la apertura de la Supersur para Bilbao?

Algo muy importante, pero no solo para la capital vizcaina, también para los municipios de la Margen Izquierda, ya que se está alejando el tráfico de larga distancia de los cascos urbanos. Eso es bueno porque se rebaja ruido, contaminación y riesgo de posibles accidentes con transportes de materias peligrosas. Cuanto más lejos de las ciudades estén este tipo de camiones, mejor.

¿Cree que los transportes de largo recorrido saldrán de la actual A-8?

Sí, y eso supondrá separarlo del tráfico interno de la metrópoli y se conseguirá más fluidez en la A-8. La Supersur aguantará sin problemas porque tiene dimensiones y capacidad, además de ser completamente nueva.

¿La nueva variante metropolitana está bien diseñada?

Sí, está bien encajada porque al final se trata de un túnel muy largo que es recto en la mayoría del trazado, solo tiene unas ligeras curvas para evitar que la gente se lance, y que tiene unos agujeros en su itinerario que acogen los viaductos que sobrevuelan las zonas sin montes. El tránsito es muy cómodo.

¿La ha probado?

He tenido esa suerte, sí.

¿Cómo ha sido la experiencia?

Da muy buenas sensaciones a la hora de conducir.

¿También de seguridad?

Sí, tiene lo último en esa materia, pero la mejor medida de seguridad va a ser que respetemos el límite de velocidad.

El máximo es 80 kilómetros por hora. ¿Es adecuada para una autopista con esos modernos sistemas de seguridad vial?

La circulación por túneles obliga a esa velocidad máxima y los usuarios tenemos que respetar esas normas de tráfico para que la autopista sea un éxito.

¿La VSM tiene radares para controlar la velocidad?

Como los que conocemos en la A-8 o los túneles de Malmasin, no; pero tiene elementos suficientes de vigilancia para saber cuándo entra un vehículo y cuándo sale después. Esos dispositivos se pueden convertir en un radar de tramo en cualquier momento, con la capacidad para medir si el vehículo ha superado los ochenta kilómetros por hora en algún tramo.

Bueno, últimamente la gente ya se contiene en la carretera por miedo a las multas, a la pérdida de puntos e, incluso, a la cárcel.

Y porque cuesta mucho más dinero llenar el depósito. Si pisas mucho el acelerador el combustible se gasta antes y hay que repostar. Otra cosa importante de la que se está dando cuenta la gente es que si va a una velocidad razonable para la carretera que tienes, llegas mucho más tranquilo. Un poco más tarde igual, un minuto o dos, pero te da lo mismo porque llegas más relajado.

Pero en el caso de la Supersur se va a tener que pagar un peaje. Eso no relaja y puede ser disuasorio.

Ya veremos. A la gente le cuesta mucho gastarse el dinero en seguridad y luego paga un dineral en copas o cervezas. Yo recuerdo que, al principio, cuando se abrió la A-8 hasta Amorebieta no se sabía si se iba a usar por ser de peaje y mira ahora. Es raro el que va por la carretera general.

Para los turismos, 1,06 euros es un precio ajustado, pero los camioneros han puesto el grito en el cielo por sus peajes en esta autopista.

Esta es una carretera diseñada para atender los tráficos pesados de paso, los camiones destrozan el asfalto mucho más que un turismo y en toda Europa la tendencia es que los camiones de paso paguen por usar esas autopistas, un coste que luego repercutirá en el precio final de la mercadería que se transporte.

O sea, al final lo pagamos todos.

Sin duda, pero el tráfico pesado hay que dirigirlo a ciertas carreteras, incluso de uso exclusivo si hace falta, en Bizkaia, Araba o Gipuzkoa, y si tiene que pagar, que pague, no sé cuánto, pero en el caso de la Variante Sur Metropolitana supongo que se habrán hecho los estudios adecuados para poner esos peajes.

¿Se va a notar de forma inmediata en la A-8 la entrada en funcionamiento de la VSM?

En algunos tramos sin duda que va a notarse, aunque luego, dirección Donostia, vuelve a desembocar en la A-8 poco antes de la entrada a los túneles de Malmasin. Creo que la gente que tiene que pasar por esa zona difícil que ahora sufre la construcción de los nuevos accesos a Bilbao se lo pensará dos veces antes de pasar por ahí. La comodidad que supone la Supersur con respecto a la A-8 no tiene parangón.

Incluso para esos camioneros que tendrán que pagar entre 7 y 8 euros.

Creo que sí, y entiendo que se quejen porque ahora la situación del sector del transporte no está bien.

El tramo que se abre el sábado es una primera fase ¿Qué ocurrirá cuando se construyan los tres tramos que restan?

Ese será el momento en el que la efectividad será del 100%.

Pero parece que habrá que esperar muchos años para que la VSM conecte primero con la AP-68 y luego con la A-8 en Amorebieta.

Es una pena que no se pueda continuar ya porque, aunque los túneles de Malmasin están bien concebidos, son un escollo evidente, ya que se pasa de cuatro a dos carriles, con lo que ello supone de posible generación de retenciones.

La diputada de Obras Públicas aseguró que la VSM sacará de la A-8 un total de 25.000 vehículos de los 100.000 que ahora circulan cada día en el tramo crítico de Bilbao.

Es una buena cifra, porque no solo quita una cantidad importante sino que le restan el tráfico de transportes pesados. A muchos conductores de turismos, los camiones les producen desasosiego y estrés y un conductor con nervios puede tener más fácil un accidente. A nadie nos gusta tener un trailer delante por el riesgo que implica y la falta de visibilidad que supone.

¿La prohibición de paso de camiones por Bilbao saturará el corredor del Txorierri como alternativa gratuita y fórmula para no circular por la VSM?

Puede que pase puntualmente pero eso va a perjudicar a los propios camioneros. Al final, para ellos es peor, ya que igual por querer ahorrar en cerillas lo van a gastar en puros.

Como ocurre con el alto de Barazar que muchos camiones lo usan para no pagar la autopista por Altube.

Efectivamente y eso provoca accidentes en más de una ocasión en la N-240 que atascan ese acceso, sobre todo en invierno.

¿Cuánto tiempo de vida va a tener la Supersur?

El diputado general ha dicho que para 50 años. Supongo que su capacidad está medida en función de la evolución de la intensidad media de vehículos...

Que ha bajado en los últimos años...

Sí, la crisis ha influido pero en esos estudios también se habrán tenido en cuenta los cambios que tienen que producirse en el futuro, sobre cómo nos tenemos que mover en transportes públicos y qué trabas se va a poner al vehículo privado, porque no podemos seguir con más tráfico en las carreteras.

Además, ya no hay más espacio para construir más variantes en la metrópoli.

Así es, no se pueden meter más y además sería una locura poner más vehículos privados en circulación. Hay que transformar los sistemas de transporte y potenciar el colectivo e ir pensando además en un transporte integral.

¿Qué significa eso?

Supone que, por ejemplo, habría que facilitar al que viene por la Supersur, y quiere entrar en Bilbao, un sitio para dejar el coche fuera del casco urbano.

¿Parkings disuasorios como los del metro en Leioa, el BEC o Etxebarri?

Algo parecido. En la Supersur, al lado del peaje de Larraskitu hay un espacio ya habilitado perfecto en una antigua cantera para construir un estacionamiento en altura donde se podría dejar el turismo y mediante un autobús lanzadera llevar a los usuarios al centro de la ciudad. Hay que aprovechar el éxito de esos parkings disuasorios y aplicarlo en ese punto de la Supersur, ya que, cuando se termine en su integridad el trazado, recogerá los tráficos también que vengan de Gasteiz a través de la AP-68.

Una de las mejoras que maneja la Diputación para la A-8 con la VSM en marcha es habilitar un carril de uso exclusivo para autobuses.

Es una probabilidad viable y oportuna al que se podrían sumar los taxis. Pero es que la A-8 tiene que cambiar más, ya que el año que viene tendrá un nuevo acceso al centro y se cubrirá en Basurto. Va a dejar de ser una vía de alta capacidad para convertirse en una autovía urbana, casi una calle como la que tenemos ahora en lo que antes era la autopista entre Begoña y el puente de La Salve. Hoy es una travesía urbana por la que se circula de forma tranquila.