Zalla. La Agencia Vasca del Agua, URA, cerró ayer en Zalla su periplo por Euskadi para recoger las aportaciones ciudadanas a los planes hidrológicos que regirán en la CAV hasta 2015. Los ciudadanos que acudieron al foro organizado por la oficina de Agenda 21 comarcal, expusieron sus inquietudes sobre el plan de encauzamiento del río Kadagua que dejaría fuera de ordenación las casas y terrenos de 150 personas. Del encuentro salió la propuesta vecinal de facilitar el seguimiento del proyecto a través de información actualizada en la web de URA.

La revisión del estudio para adecuarlo a la probabilidad de que se produzca una crecida cada cien años en lugar de los 500 que estaban proyectados, minimizará las afecciones. Así lo creen los técnicos que ayer estuvieron en Zalla. "Queremos transmitir un mensaje de calma. El proyecto aprobado en 2008 no se ejecutará. Las nuevas obras entrañarán menos dificultades técnicas y menor impacto ambiental y para los usuarios", reiteraron Iñaki Arrate y Alberto Manzanos, técnicos de la Agencia.

Según explicaron, "los encauzamientos se plantearon como requisito para aprobar los planes urbanísticos". Algunas de esas actuaciones que se llevaron a cabo en el pasado "primaron la protección de los núcleos urbanos, pero descuidaron el medio ambiente". Desde el año 2000, en cambio, "se mira por establecer un equilibrio entre la conservación del ecosistema y las edificaciones".

Alternativas Los afectados consideran que otras medidas bastarían para evitar los desbordamientos en el Kadagua. "Lo que hace falta es dragar el cauce", propuso un vecino. Otro reclamó "que se realice anualmente una limpieza de la ribera del río para eliminar los residuos y la maleza".

La inundabilidad es solo uno de los aspectos que se tienen en cuenta a la hora de diseñar el plan hidrológico. En lo que respecta a la contaminación que se vierte al río o las redes de saneamiento y abastecimiento, los técnicos de URA certifican que "Enkarterri tiene unas condiciones envidiables y ha mejorado mucho en poco tiempo".