Los sindicatos del metro dudan del preacuerdo
Creen que el documento presentado por la dirección es ambiguo sobre el futuro de la plantilla y le exigen mayor concreción Avisan de que los paros siguen convocados para los miércoles de octubre
Bilbao. Los sindicatos de Metro Bilbao no se fían de Iñaki Prego. Varias centrales sindicales mostraron ayer sus reticencias sobre el preacuerdo firmado el pasado martes a la nueve de la noche. Recelan de varios puntos y consideran que las prisas en firmar el acuerdo, antes de las 11.00 horas de mañana, son, cuanto menos, sospechosas. Además recordaron que hasta el momento siguen convocados los paros para los miércoles de octubre.
Xabier Durango, secretario de Hainbat, federación de ELA que engloba a los transportes públicos, aseguraba ayer, tras haber realizado un análisis exhaustivo del preacuerdo y su gestación, que "varios puntos son susceptibles de interpretaciones diferentes y lo que firmemos tiene que ser mucho más concreto y claro, que lo entienda mi amama". Lógicamente, los acuerdos en los que se habla de la plantilla son los que menos gustan.
Raúl Méndez, delegado de LAB, aseguraba que "entre el primer y el sexto punto del acta de la reunión pueden existir contradicciones". Según el preacuerdo al que ha tenido acceso DEIA, mientras el primer punto especifica que "la actividad a prestar los años 2010 y 2011 se realizará con la plantilla actual sin detrimento del servicio a realizar", incluyendo las ampliaciones de trazado previstas el próximo año; en el apartado sexto se asume el compromiso de renovar los contratos temporales en vigor y de readmitir a los cuatro trabajadores recientemente desvinculados "de manera preferente cuando surjan nuevas necesidades de plantilla". Esta coletilla se puede interpretar de muchas formas y una de ellas es que la dirección considere que no van a surgir nuevas necesidades al obligar a los empleados en plantilla a trabajar con más productividad.
El portavoz de LAB tampoco entiende las prisas por aprobar el acuerdo. Méndez entiende que "el viernes después de la reunión con el comité, Prego tiene que asistir al consejo de administración de Metro Bilbao y querrá ir con un acuerdo cerrado para colgarse la medalla". Sin embargo, considera que "las prisas son malas consejeras y es mejor concretar bien el acuerdo, que en principio parece bueno, y nosotros estamos dispuestos a negociar; si no, seguiremos con los paros convocados, no hay prisa".
Al Colectivo Independiente del Metro (CIM) tampoco le gusta la redacción del documento al considerar que "está poco definido, por ello vamos a presentarlo mañana (por hoy) a los trabajadores y que valoren las aportaciones que vamos a realizar", indicó un portavoz del sindicato sectorial.
Esta consulta a los empleados también la llevará a cabo LAB en unas asambleas abiertas a toda la plantilla. ELA, por su parte, aportará hoy al resto de los sindicatos que forman el comité de empresa su visión del preacuerdo y valora el presentar algún tipo de documento anexo al preacuerdo cuando acudan a la reunión de mañana con la dirección.
De todas formas, un buen test de cómo respira la empresa ante la reticente postura sindical se dará hoy mismo. Ambas partes acuden al organismo de intermediación del PRECO con la propuesta de paros de octubre y los servicios mínimos que creen necesarios. "La actitud que exponga la dirección puede dar muchas pistas de cara al viernes", explicaba el responsable de LAB.
EuskoTren Por otra parte, y dentro del conflicto laboral que también mantiene EuskoTren con sus trabajadores, ambas partes tendrán hoy el primer encuentro para negociar cómo la empresa convierte en fijos el centenar de empleos estructurales que se ocupan con trabajadores sin contrato fijo. Por estructural se entiende la plaza que, por ejemplo, deja una trabajador tras jubilarse y es cubierta por un contrato eventual.
El presidente del comité de empresa, Txema Negro, indicó ayer que "solventada la no renovación de los cinco trabajadores ahora hay que tratar este tema, que es el verdadero problema de EuskoTren". Los paros se han propuesto ante el temor de los trabajadores a que el plan de optimización que maneja la dirección quiera eliminar estos empleos que son necesarios para dar servicio a los usuarios.
Según los datos que manejan los sindicatos, todos los transportes que gestiona la compañía dependiente del Departamento de Obras Públicas y Transportes del Gobierno vasco son operados por una plantilla de 945 personas, de los que 200 son eventuales, un centenar estructurales y el resto, operarios que cubren sustituciones, bajas o periodos de maternidad.
Más en Bizkaia
-
Bizkaia trabaja para que el impuesto a multinacionales y a la banca podría estar para finales de año
-
Venden gorras en la fan zone del United con un mensaje que recuerda a Donald Trump
-
Basauri creará un huerto urbano en el parque de Iruaretxeta con entre 80 y 85 parcelas de 40 m2 de superficie
-
La marea blanca del Tottenham conquista Ametzola