Es el signo del siglo XXI, donde la tecnología, el diseño y la innovación se conjugan como los elementos esenciales para el Renacimiento que se avecina. Los últimos descendientes de Leonardo da Vinci no se alzarán sobre frágiles andamios con una corte de discípulos sino que dispondrán de un sofisticado ejército de robots de última generación; no recurrirán a la contemplación de la naturaleza para el cálculo de formas y volúmenes sino que harán geometría de precisión mediante el autocad; no recurrirán a la alquimia en busca de nuevas soluciones y materiales sino que recurrirán a la investigación aeroespacial. Es, insisto, el santo y seña de nuestro tiempo, donde el mecenas no es un Medici sino un enriquecido software.
La necesidad de adelantarse a su tiempo es conocida por BMW desde sus comienzos, cuando el fin de la Primera Guerra Mundial y el Tratado de Versalles prohibió la fabricación de motores de aviación -su principal y casi exclusivo sustento entonces...- durante cinco años. Es por ello que no extraña su última decisión: presentar el nuevo BMW serie 5, que ya va por la sexta generación, como una obra de arte, una creación digna de Da Vinci. Lo hizo ayer en el Palacio Euskalduna de la mano de Luis Satrústegui, jefe de área de la zona norte de la marca. Cubiertos por un chal de entretiempo, los coches expuestos en el vestíbulo de palacio aguardaban rodeados por cinco esculturas - Los pliegues de la belleza, de David Rodríguez Caballero; Enroscada, de Diego Canogar; Amistad, de Arturo Berned; Cúmulo, de Cristina Almodóvar, y Torsión B7, obra de José Luis Casas. Estaban en familia.
¿Es una exageración hablar en estos términos...? Puede apostarse a que no. El nuevo BMW serie 5, una berlina de altos vuelos, conjuga en sus carnes metálicas elegancia y deportividad. La dieta de paneles, puertas y capós construidos en aluminio en lugar de acero aligera cada vehículo en 23 kilos. No es la única sorpresa: la caja de cambios de ocho velocidades se anuncia como una revolución y el sistema Efficient Dynamics, mejor las prestaciones y ahorra en emisiones de CO2 y en combustible. Quienes conocen su mecánica aseguran que el sistema Park Assits es una veta de oro en el salpicadero. No por nada, avisa al conductor si el coche entra o no en ese hueco que tanto atrae y tantas dudas despierta. Este nuevo modelo tiene una motorización en gasoil, 530d, y tres motorizaciones en gasolina, 523i, 535i y 550i, un v8 de 407 caballos; pura fuerza de la naturaleza ingeniera.
Llegaron a Bilbao en un acto organizado por Bikar Motor, con su gerente, Conchi Nacarino, a la cabeza, y Armotor, con Iñaki Iglesias a la cabeza. Junto a ellos estuvieron Begoña Gaztañaga, Alex Alonso de Armiño, Pablo Marañón, Luis Goñi, Estefanía Alonso, Pablo Obra, José Antonio Calonge, Aitor Pedrueza, José Antonio Calonge, Josu Molinos en nombre de DEIA; Ana María Isasi, Pilar Cabué, Fernando de la Cuesta, Jesús Medrano, Marilen Gil, Maxi García, Ane Baltza, Tomás Ruiz, Ángel Cormenzana, Juan del Val, Ángel Landeta, José Gardiazabal, Javier de la Sen, Rafa Bustamante, José Manuel Vesga y un selecto grupo de admiradores de esta creación.