Galdakao. El Ayuntamiento de Galdakao está estudiando la posibilidad de construir un parking en superficie, que se ubicaría alrededor del depósito de aguas en el barrio de Tximelarre. Una medida ideada tras las quejas elevadas por la asociación de vecinos del barrio ante la pérdida de plazas que sufren, a consecuencia de las obras de reurbanización que el Consistorio lleva a cabo en la zona.

"Las casas que conforman Tximelarre son antiguas y no vienen con garaje, la gente no encuentra aparcamiento", se quejaba Ángel Ruiz, presidente de la asociación vecinal. La iniciativa que espera terminar con este problema fue puesta sobre la mesa durante la reunión que esta semana han mantenido los responsables municipales con ocho asociaciones vecinales del municipio -Urreta, Tximelarre, Elexalde, San Ignacio, Aperribai, Bengoetxe, Bekea, Olabarrieta y Gorosibai.

Este encuentro sirvió para que políticos y vecinos debatieran sobre los problemas de transporte que vive Galdakao en los últimos tiempos. Así, los presidentes de las asociaciones pidieron al Ayuntamiento un balance de las plazas de aparcamiento que han ido desapareciendo del municipio a medida que se iban modernizando calles y ensanchando aceras.

"El balance es claro. El Ayuntamiento evalúa en 850 el número de plazas que prevé que sean eliminadas cuando acaben las obras en los diferentes barrios. Por otro lado, cifra en 1.398 las nuevas plazas de aparcamiento creadas en los últimos cinco años. De estas parcelas creadas, 901 son plazas de parkings subterráneos con precios que oscilan entre los 14 y los 16.000 euros. El resto -497- son plazas en superficie y gratuitas", explican desde el Ayuntamiento.

A pesar de estas cifras, los vecinos siguen proponiendo algunas soluciones para que aparcar sea más sencillo en el municipio. Entre ellas, pidieron que el parque de Plazakoetxe o el solar cercano a la salida a la autopista fueran adecuados como parkings. Pero los responsables municipales han desestimado las dos opciones. La primera, porque no quieren eliminar una zona verde que, además, no acogería más que una veintena de coches. La segunda, porque el Ayuntamiento no es dueño de ese terreno perteneciente a un particular.

"Queremos que sepan que, a pesar de que no hayamos aceptado estas ideas, seguimos trabajando en este aspecto", explican desde el Consistorio. Así, recuerdan que el terreno situado detrás de la casa de cultura de Torrezabal se convertirá el año que viene en un parking de rotación con 114 plazas con precios "blandos". "Barajamos cobrar un precio simbólico de entre diez y veinte céntimos la hora", aclaran.

Además, creen que con la puesta en marcha de los parkings subterráneos, los vecinos encontrarán más huecos libres donde estacionar en el municipio. De los cinco aparcamientos subterráneos construidos (Berezikoetxe, Laminarrieta, Iturrondo, Paopa y Lapurdi), la ocupación "está en niveles máximos, salvo en el caso de Paopa", aseguran. "Berezikoetxe e Iturrondo están al 100% (con lista de espera), en Laminarrieta quedan 20 plazas y en Lapurdi, que se pondrá en uso en este diciembre, quedan prácticamente 50 parcelas por llenarse", detallan.