El Ayuntamiento de Bilbao ha facilitado algunos ejemplos del impacto que tendrá la nueva tasa de basuras en la economía familiar de los contribuyentes. Si hasta ahora el cálculo del tributo se llevaba a cabo a través de la clasificación fiscal de cada calle, ahora se tendrán en cuenta variables más particulares, como el valor catastral de cada vivienda o el número de personas empadronadas en cada domicilio.

De esa manera, una vivienda en la Gran Vía, con un valor catastral de 526.985,64 euros y con dos personas empadronadas, pasará de pagar 194,6 euros en 2025 a pagar 391,39 euros en 2026. Prácticamente el doble debido al elevado valor del inmueble y, en consecuencia, al poder adquisitivo que se atribuye a sus moradores.

El incremento no será tan notable en otros casos. Una familia de 4 personas con una vivienda en la calle República de Begoña –con un valor catastral de 125.672,16 euros– pasará de pagar 119,6 euros a pagar 169,68 euros. En el caso de una pareja que resida en Lehendakari Agirre –en una vivienda con un valor catastral de 151.624,42 euros– el recibo de la tasa de basuras le subirá de 145 euros a 175,73 euros.

Una unidad convivencial formada por dos personas en Plaza Haro –en un piso tasado en 105.318,35 euros por la Diputación– pasará de pagar 145 a abonar 149,12 euros por este recibo. Y en el caso de una vivienda de la calle Iturrigorri, cuyo valor catastral sea de 52.868,04 euros y cuente con dos personas empadronadas, la factura subirá de 91,6 euros a 118,99 euros.