El modelo de gestión de Azkuna Zentroa será objeto de debate en el pleno municipal de Bilbao que tendrá lugar la próxima semana. El rechazo del director Fernando Pérez al proyecto que la Fundación la Caixa pretende implantar en el centro de cultura contemporánea –razón por la que inesperadamente presentó su dimisión a finales del año pasado– ha motivado que se abra una brecha entre las diferentes formas de entender la ocupación de sus espacios, así como el objetivo que se persigue con las iniciativas llevadas a cabo en los mismos. En ese sentido, EH Bildu elevará al hemiciclo una moción para pedir al gobierno municipal que rectifique su decisión de ceder el espacio a una fundación y frenar lo que consideran un “proceso de privatización”.
El propio alcalde Juan Mari Aburto reconoció que la renuncia de Pérez “tiene que ver con la visión de futuro de Azkuna Zentroa”. Concretamente, se debe al deseo de la Fundación La Caixa de implantar en el centro cultural su aula Steam, un proyecto educativo que busca impulsar el interés en la ciencia, la tecnología y las matemáticas. En principio, la iniciativa recalaría en el espacio que ocupa actualmente Lantegia, conocido como laboratorio de ideas, “un espacio de experimentación en el que la cultura contemporánea se conecta con la sociedad”. Así, mientras que la llegada de La Caixa se ha interpretado por Fernando Pérez como una “ocupación inadecuada” del espacio, desde el Ayuntamiento de Bilbao, más que una privatización, se ha considerado “una inversión en educación”.
MOCIÓN A PLENO
En ese sentido, EH Bildu ha exteriorizado su “preocupación” por las iniciativas culturales que actualmente se desarrollan en Lantegia, donde, según el Proyecto Programa, se llevan a cabo residencias de artistas, entre otras actividades. “El gobierno municipal ha decidido dar un giro sorpresivo y ceder dicho espacio a la fundación La Caixa, poniendo en solfa un proyecto artístico y cultural de éxito y demostrando una improvisación preocupante en el ámbito de las políticas culturales de la villa”, ha afirmado este lunes la portavoz de la formación, María del Rio, quien considera que al realizar la cesión a una fundación privada “se perderá completamente la capacidad de tomar decisiones sobre dicho espacio y explotar sus potencialidades”.
A juicio de Angélica Orozco, concejala de EH Bildu, la llegada de la entidad financiera supondrá que se pierdan “1.500 metros cuadrados de espacios culturales para dejarlos en manos de La Caixa que, además, no pagará por la explotación de dicho espacio”. En palabras de la edil, se prevé que sea la Diputación Foral de Bizkaia la que, “con dinero público, pagará 13.000 euros al mes, 166.000 euros al año, por el uso por parte de una fundación privada de un espacio público”.
Según María del Río, es “público y notorio el malestar” en “amplios sectores de la sociedad bilbaina” ante esta decisión, sobre todo en el ámbito de la cultura. Por ese motivo, durante el pleno que tendrá lugar el próximo 30 de enero presentarán una propuesta para “mantener la gestión pública de dicho espacio y que se aseguren los proyectos culturales y artísticos que ahí se realizan”. En ese sentido, ha añadido que aunque está de acuerdo en que el centro cultural necesita “un impulso”, “la privatización a trozos de la Alhóndiga no es la solución, como ya se ha demostrado con las piscinas, que han pasado recientemente a ser gestionadas por Bilbao Kirolak”.