Desde un atril dispuesto para la ocasión, el alcalde Juan Mari Aburto ha hecho un llamamiento a la reflexión a los sindicatos del ámbito público. Esta invitación llega tras un primer año de mandato en el que el gobierno municipal ha tenido que lidiar con sonadas huelgas como la de Bilbobus o Bilbao Kirolak. Sin embargo, más allá, el espacio público de la ciudad a menudo se convierte en escenario de conflictos laborales de otras instituciones o de empresas privadas por las continuas manifestaciones que alberga. “La lucha sindical no es esa que perjudica a la ciudadanía en su día a día, en su calidad de vida. Las discusiones se deben hacer en una mesa y no en la calle”, ha recordado el primer edil, durante el pleno del Estado de la Villa que ha tenido lugar este viernes, en el que ha evidenciado que las protestas “en muchos casos, han sido verdaderas faltas de respeto a bilbainas y bilbainos y a sus representantes”.
Juan Mari Aburto ha comenzado su intervención con un sentido recuerdo al exconcejal Iñigo Pombo, fallecido el pasado mes de agosto, “ejemplo de buena persona, un hombre de paz y de fuertes principios éticos”. Durante poco menos de una hora, ha compartido su percepción de la situación actual de la ciudad, en la que percibe un contexto de “enfado permanente”. En ese sentido, ha considerado que uno de los efectos de la pandemia ha sido el exacerbamiento del individualismo de la sociedad en general. “Quejas de todo tipo escuchamos todos los días quienes nos dedicamos a la política, pero hay algunas que no dejan de sorprenderme. ¿Sabemos el esfuerzo humano, técnico y económico de las mejoras que se hacen en cualquier sitio?”, ha preguntado.
En ese sentido, se ha mostrado un firme defensor de “un servicio público basado en valores y principios” y ha aseverado, que la política de su equipo de gobierno –formado por el PNV y PSE– “es la de los hechos”. Así es como se han conseguido algunos de los reconocimientos, como el otorgado por National Geographic a Bilbao, “la mejor ciudad para vivir a nivel del Estado”. A pesar de ello, ha destacado que no se zafa de la autocrítica. “No es una ciudad idílica ya que también la población nos exige hacer más en temas como la inseguridad, el tráfico, la vivienda, la mejora de los barrios, la sostenibilidad...”, ha apuntado el alcalde, quien, con todo, ha apelado a la colaboración de los ciudadanos: “Si creemos que todo lo tiene que hacer el Ayuntamiento nuestras exigencias serán ilimitadas”.
PACTO DE SEGURIDAD
En lo que respecta a la seguridad, en concreto, ha matizado que recientemente se ha firmado un nuevo Pacto de Seguridad a través de un “acuerdo plural que nos implique a mejorar todo los posible la percepción de la inseguridad en la ciudad y que sirva para incrementar la seguridad personal y la colectiva”. Por ello, ha emplazado al Partido Popular a sumarse a un pacto que ya recoge algunas de las propuestas de los populares. No obstante, durante su respuesta, la portavoz Esther Martínez ha declinado la invitación ha colaborar en un pacto “con imprecisiones medidas, omisiones interesadas y exclusiones sonrojantes”. “Bilbao tiene que mejorar la seguridad”, ha reconocido posteriormente el alcalde, quien no obstante ha solicitado que se haga el diagnóstico correcto, ya que, considera, “estamos en una buena posición”.
COMPROMISOS
Juan Mari Aburto ha apuntado que entre los 80 compromisos adquiridos en el presente mandato dos ya se han ejecutado, 23 están ejecutándose y 55 están ya en fase de diseño o de lanzamiento. En esa línea, ha recordado algunos de los proyectos más significativos en marcha en materia de planificación urbana, como la definición de los ámbitos de Abando y Punta Zorrotza, el Plan de Artxanda, el polo audiovisual de Punta Zorrotza o el Plan Especial de Usos de la Ría. En otras áreas ha mencionado el desarrollo de nuevas parcelas en el Parque Tecnológico Urbano de Zorrotzaurre para empresas, la puesta en marcha de la Casa de las Mujeres, la nueva comisaría de Santutxu o la próxima licitación del nuevo Parque de Bomberos de Deusto. Destaca a su vez, la licitación del nuevo servicio de Bilbao Bizi o del Estudio de Zonas Tensionadas de Bilbao, entre otras cuestiones. Entre lo que ya se ha realizado ha mencionado la nueva sala de exposiciones de Bilbao Arte o la implantación de la Zona de Bajas Emisiones.
Tras escuchar la intervención de los grupos de la oposición, Aburto ha recalcado que “trasladar que en Bilbao está todo por hacer es un mensaje que no es correcto”. De hecho, ha recordado que hace seis años Zorrotzaurre era una península. “Hoy es una isla y hay tres universidades, hay más de 1.000 universitarios. Se están construyendo viviendas y equipamientos públicos. Es una realidad. Es importante reconocer lo que hemos hecho”, ha enfatizado. Asimismo, ha defendido que el Consistorio “no está apostando por poner todos los huevos en la cesta del turismo”. Muestra de ello es, a su juicio, que el objeto principal de desarrollo económico son los servicios avanzados, un objeto de desarrollo para la riqueza. Ese es el motivo del polo científico-tecnológico de Zorrotzaurre. Y todo ello sin olvidar los servicios sociales. “Cada vez ayudamos a más gente en el Servicio de Ayuda a Domicilio. Somos una referencia”, ha asegurado.