El mejor vermú de Bilbao se prepara en Indautxu
La Destilería ofrece la bebida bajo el nombre 'Bilbao pasado y futuro', que ya se ha convertido en un imprescindible para muchos bilbainos
Cuando a alguien le gusta lo que hace, se nota. Y cuando las cosas se hacen con entusiasmo, triunfan. Eso es lo que ha ocurrido en La Destilería con Juan Calderón, el coctelero dominicano que transmite su pasión en cada mezcla y que ha creado en el local de Indautxu el que ya se conoce como el mejor vermú de Bilbao.
Bajo el nombre 'Bilbao pasado y futuro', Calderón ha diseñado una bebida que transporta a quien la prueba a aquel Bilbao industrial donde las fábricas eran las protagonistas, y a su vez, recoge el sabor del Bilbao más moderno. Ha sido en la IX edición de la ruta-concurso del vermú preparado de Bilbao-Bizkaia en la final a seis celebrada en el hotel Ercilla, organizada por Bilbao Centro y Cinzano Vermouth, donde el vermú de La Destilería ha conseguido alzarse como el mejor de Bilbao aunando dos momentos clave de la historia de la capital vizcaina.
¿Cómo lo consigue? Con una mezcla muy pensada y medida. Algo más de tres semanas tardó el equipo de La Destilería en conseguir materializar lo que tenían en mente. "Fueron muchos días de pruebas y de darle vueltas a la cabeza", explica Calderón.
La fórmula del mejor vermú
El vermú tiene como base el vermú Cinzano, y este clásico de la Villa en La Destilería le añaden centilitro y medio de Campari "para dar ese toque de amargor que tanto gusta en el vermú". Calderón también le añade unas gotas de Laphroaig, un whisky que es de la zona de Islay que le da al vermú "las notas a humo tan características de los whiskys de esa región y tan típico de aquel Bilbao industrial". Después añade unas gotas del agua de las piparras, un producto típico de la gastronomía en el día a día.
"Para dar ese toque de futuro, ese toque cosmopolita", explica, el vermú lleva un centilitro de mamajuana, una bebida típica de República Dominicana que se hace a base de ron añejo, vino tinto y miel y ciertas raíces medicinales. "Todo dominicano tiene una mamajuana en su casa; es afrodisiaco", explica Calderón sobre la bebida que le da ese toque de gracia al vermú.
Para terminarlo y así, "equilibrarlo", el vermú lleva unas gotas de angostura. "Luego es enfiar y para perfumarlo se le pone un twist de naranja que le da ese toque cítrico", matiza. Pero la experiencia no solo reside en el vermú, sino que en La Destilería acompañan el mejor vermú de Bilbao con un gilda muy diferente que lleva cebolla morada encurtida, atún rojo, piparra, una bolita de melón dulce, sésamo tostado y un aliño de soja, aceite de oliva, lima y fruta de la pasión. Tanto el vermú como la gilda se sirven en un pequeño plato rodeado de hielo, simulando los astilleros de Bilbao.
Doce litros en una hora
Tanto ha sido el éxito de esta creación que solo en una hora, este domingo, llegaron a vender hasta doce litros. "Ha sido una verdadera locura", confiesa Calderón. Tras alzarse con el premio, no pensaron que la repercusión iba a ser tal, y el primer día comenzaron a prepararlos a mano, uno a una, algo que desbordó completamente las previsiones. Por ello, ahora cuentan con una mezcla ya preparada que sirven de grifo y que después terminan en barra.