Los taxistas de Bilbao y Bizkaia están cabreados y de uñas. El cambio en las condiciones de contrato que están aplicando las aseguradoras en sus vehículos están suponiendo, por una parte, incrementos en los costes anuales de hasta un 300% cuando los taxistas cambian de vehículo y que a los que quieren entrar en el gremio directamente les nieguen la suscripción de la póliza.
Borja Musons, presidente de Radio Taxi Bilbao, la asociación con mayor número de profesionales en el territorio, confirma que “muchos compañeros ya no saben qué hacer y algunos incluso no pueden trabajar”.
Este escenario no solo se circunscribe a los 1.300 profesionales del volante que circulan por Bizkaia, es una situación generalizada en el gremio del Estado que se da desde hace poco menos de dos años. “El problema no es que nos pongan pegas para asegurarnos, es que directamente no nos aseguran”, declara contundente.
Detalla como “hay gente que entra nueva, personas entre 40 y 50 años, que no han tenido un accidente en su vida o alguno pequeño como cualquier conductor normal, y le piden seguros de hasta 4.000 y 5.000 euros al año. Eso es una aberración”.
Otra casuística atañe a los profesionales ya con muchos kilómetros a las espaldas y que cambian de coche. “Se dan casos de compañeros que pagan 800 euros de seguro y al estrenar vehículo le meten 3.500 euros de póliza siendo la misma persona que no ha dado apenas partes”, desvela Musons.
¿Cuáles son las razones para estos incrementos tan abultados? Según explican varios taxistas las aseguradoras han incluido a su gremio en el grupo de los VTC, Uber y Cabify, flotas con un alto grado de siniestralidad, que obligan a las aseguradoras a implantar primas muy elevadas. Musons no aseguraba este extremo, que es vox populi entre sus compañeros, pero sí decía que “tenemos indicios, no pruebas, de que al estar en el mismo grupo se han disparado tanto las primas de seguros”.
Reconoce que esta nueva movilidad contratada por teléfonos móviles está generando unos conductores que no tienen nada que ver con los taxistas. “Esa falta de profesionalización y su precariedad laboral, que es una barbaridad, genera que tengan una siniestralidad muy alta”.
Pone un ejemplo. “Aquí en Bilbao los taxistas son profesionales que conocen la ciudad y te llevan sin problemas a una dirección. Los de Uber, no, van conduciendo mirando al navegador y eso genera accidentes, evidentemente”.
Y eso que en Bilbao apenas operan coches de Uber. “Aquí tiene muy poco movimiento, solo los toman los extranjeros que vienen, los locales que los han cogido alguna vez ya han visto los sartenazos que cobran y no los quieren ver ni en pintura”, describe el taxista.
¿Y qué están haciendo los taxistas? Musons contesta que “hay quienes no pueden salir a trabajar al carecer de seguro. Otros se vuelven locos buscando pólizas, lo más baratas posible, en corredurías y compañías súper extrañas como, por ejemplo, Mutua Panadera de Seguros y eso conlleva lo que conlleva. Es un problemón”.
Ante un escenario tan complicado algunos profesionales ya se están planteando crear una mutua propia que asegure al sector algo que desde Radio Taxi Bilbao ven difícil. “Tendríamos que empezar con todo desde cero y aunque estamos organizados como colectivo ¿qué pasa? ¿que al final vamos a tener que hacer un ecosistema propio?”, se plantea el presidente.
Su asociación también se ha dirigido al Ayuntamiento de Bilbao “porque no hay que olvidar que somos un servicio público al que nos imponen muchas obligaciones”, indica Musons. Sin embargo, la respuesta municipal no les ha convencido. “Nos indican que no tienen opción de hacer algo y nos dirigen al Consorcio de Compensación de Seguros donde las primas son más caras todavía, porque ahí solo acuden los conductores en general que no son admitidos por las aseguradoras privadas por su siniestralidad”.
Otro inconveniente existente es la posibilidad de protestar en colectivo. “Si las aseguradoras nos incrementaran a la vez las pólizas a todos, igual nos levantaríamos en pie de guerra, pero las subidas son particulares. De todas formas como no se arregle con el tiempo nos hartaremos”, augura Musons. Expone con una queja amarga cómo “se supone que tenemos gobiernos, leyes, normas que están para que no haya abusos por parte de unas aseguradoras que están haciendo lo que les da la gana”.
A pesar del planteamiento, Musons, también vicepresidente de Antaxi, la asociación estatal del taxi, no quiere enfrentarse a las compañías. De hecho, comenta que “hemos tenido reuniones con las aseguradoras y se han quedado en eso, conversaciones, no hemos sacado nada en claro”.
Desde Unespa, la asociación a nivel estatal de compañías de seguros, no han querido entrar a valorar esta situación y las críticas del sector del taxi. Fuentes de la misma defendieron las decisiones de cada uno de sus socios y que como asociación no tenían una opinión unificada sobre este tema.
Al detalle
Hasta 5.000 euros por la contratación de la póliza
A algunos conductores de taxis les han llegado a pedir hasta 5.000 euros por asegurar el vehículo durante un año “con la clara intención de no cogernos como clientes”, indican los taxistas.
Ayuntamiento
Sin opción a aportar soluciones
Radio Taxi Bilbao se ha dirigido al Consistorio para intentar buscar alguna solución que desde el área de Movilidad no pueden aportar dirigiéndoles al Consorcio de Compensación de Seguros.
La cifra
1.300
Es la cifra aproximada de taxistas que operan en las distintas poblaciones del territorio de los cuales más de la mitad prestan sus servicios en la capital vizcaina con la asociación Radio Taxi Bilbao como principal referente del colectivo de conductores.