Entre toallas, mantas y juegos de cama sin olvidar las tradicionales y características confecciones de cortinas para salones y habitaciones. Pedro Salcedo es un icono referente de la moda del hogar que lleva 126 años dando vida a los domicilios de Bilbao. Durante su larga trayectoria han ofrecido un trato exclusivo al cliente en el diseño del hogar.
En sus años en activo, el comercio centenario ha afrontado diferentes situaciones muy complicadas en las que destacan las inundaciones de 1983. A lo largo de su historia, la gerencia del establecimiento ha estado en diferentes manos. Desde los orígenes con Pedro Salcedo padre terminó llegando a Francisco Fernández, más conocido como Patxi. El bilbaino ya estaba muy familiarizado con el mundo de los textiles en la villa. De hecho, conoció la tienda de Pedro Salcedo porque necesitaba vender el tema textil, tejidos, corbatas etc... En aquellos años, la relación con Pedro Salcedo era como cliente.
ÉXITO ABSOLUTO
Uno de los días que estaban trabajando le comentó que él estaba pensando en el retiro por lo que le propuso a Patxi ser el encargado de Pedro Salcedo. Fernández se negó a la propuesta proponiéndole ser su socio. Unos meses después llegaron a un acuerdo, Pedro Salcedo se quedó con la tienda de Las Arenas y Patxi con la de Bilbao. En las manos de Francisco Fernández, el negocio fue un éxito absoluto y convirtió el comercio en uno de los más querido en toda la ciudad.
ETAPA BRILLANTE
Patxi recuerda una etapa brillante logrando una tienda muy popular en Bilbao. No fue nada fácil porque tuvo que variar el modelo de negocio. Este cambió con la llegada de las grandes superficies a la ciudad como El Corte Inglés, Mango o Zara pero la visión empresarial de Patxi no tenía límites. Pedro Salcedo hizo miles de tarjetas en las que ofrecían un 25% de descuento, incluso aquellas personas que no la tuviesen también recibían un 10%. Esta fue una de las claves del éxito que provocaba colas diarias para adquirir sus confecciones.
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Después de más de 55 años trabajando con Pedro Salcedo, Patxi tuvo que pasar por quirófano. Dejó el negocio de confecciones por excelencia de la ciudad para centrarse en su recuperación personal. Sus sucesores convirtieron un negocio referente en Bilbao por el que han pasado cientos de miles de familias en un fracaso total llegando a cerrar el negocio durante seis meses.
REAPERTURA 6 MESES DESPUÉS
En el equipo de trabajo que Patxi se encontraba Ludy Fernández. Una mujer contable que durante los 29 años que estuvo trabajando para Francisco Fernández se fue formando mediante cursos para obtener su mejor versión día a día. Con el cierre del negocio, Ludy se quedó sin saber qué hacer. Seis meses después del cierre de Pedro Salcedo, Ludy Fernández se puso en contacto con Patxi para ver si podía reabrir el negocio. Una propuesta a la que el propio Francisco Fernández no puso oposición.
Antes de abrir la tienda contactó con algunos de sus excompañeros para saber si estarían dispuestos a trabajar con ella. Muchos con los que habló estaban trabajando y de los que quedaron libres empezaron tres en el equipo de Ludy. El resto fue personal nuevo.
Al poco tiempo de la reapertura del emblemático establecimiento su marido, Diego Muñoz dejó la fábrica en la que trabajaba para unirse a su mujer en la nueva aventura empresarial. El próximo 22 de mayo llegarán a los siete años al frente del negocio textil después de lanzarse a la aventura y reabrir un negocio emblemático que estuvo seis meses con la persiana bajada.
Los próximos años están asegurados en Pedro Salcedo. El matrimonio espera jubilarse en la tienda. Tienen una hija que está estudiando una carrera universitaria y que no descarta continuar con el negocio que reabrieron sus padres. Por lo que el futuro es incierto pero prometedor para el negocio textil por excelencia con 126 años dando vida a los hogares de Bilbao.
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