El crecimiento turístico que está experimentando Bilbao ha provocado que incluso las calles más insospechadas sean susceptibles de acoger hoteles. Uno de los próximos alojamientos que abrirá sus puertas en el Casco Viejo será Goien Botique, un pequeño hotel de 18 habitaciones que se ubicará en el número 3 de la calle Somera. Gonzalo Martín e Iñaki Abarrategi, dos vizcainos que apenas tenían vínculos con el sector turístico, son los promotores de esta iniciativa que nace con una pretensión clara: ser el hotel “más chulito” de Bilbao. Y lo proclaman con la conciencia del lujo de detalles con el que lo han diseñado. El ejemplo más visible son los forjados del escultor Jon Alberdi que ya se ven en los ventanales de la fachada. “Está orientado a turistas con poder adquisitivo que sepan reconocer que lo que van a invertir en costes se lo vamos a ofrecer”, asegura Martín.

Según explica el promotor, tenían claro desde un inicio que querían abrir un hotel en el Casco Viejo. Y fue en Somera donde surgió la oportunidad, en un edificio que estaba casi en ruinas. “Es una calle un poco estigmatizada por el ambiente que había hace años. Hoy es una calle de disfrute”, considera Gonzalo Martín, quien defiende que, a diferencia de otras iniciativas hoteleras, ellos no son un fondo de inversiones. “No nos preocupa el tema de las estrellas. Nos autodenominamos hotel botique, aunque eso se tiene que demostrar con la excelencia en la decoración y en el trato que das al cliente”, argumenta este empresario, quien apostilla que son los usuarios quienes realmente tienen que valorar el nivel del servicio que ofrecen.

Ellos se han volcado en que el resultado del trabajo se perciba. “La fachada tiene su historia, es un capricho”, indica Gonzalo Martín sobre la delantera del edificio cuyo resultado final ya se intuye. Según relata, en las obras han echado mano de un tipo de piedra procedente de una cantera de Soria que fueron a buscar específicamente. Sin embargo, lo que más está dando de qué hablar es la obra de herrería que ya se ve colgada de las ventanas y pronto podrá verse también en los balcones. “Está hecho por Jon Alberdi, uno de los mejores artistas en el ámbito del forjado artístico”, expone sobre el escultor que ha trabajo dos años para llevar a cabo este encargo concreto.

Facha del nuevo hotel de la calle Somera de Bilbao Pablo Viñas

Pero los detalles exceden aquello que se ve por fuera. “Tenemos unas lámparas que las hace una empresa de Lekeitio con showroom permanente en París; la lencería de cama es de algodón egipcio de 300 hilos con nuestro logotipo bordado; los suelos llevan la madera más cara y los baños están hechos con Porcelanosa”, enumera. Por ello, confía en que la clientela del hotel sea aquella “capaz de apreciar” lo que ofrecen. “Desconocemos el mercado, pero la gente que ha accedido ya al interior nos dice que seguramente trabajemos con un índice muy alto de extranjeros. Aunque nosotros estaremos encantados de recibir también a donostiarras”, matiza Gonzalo Martín, quien reconoce que el alojamiento “no está planteado para despedidas de soltero”.

El edificio cuenta con seis plantas, una de ellas subterránea. “Es la que está destinada al servicio, cuenta con una pequeña cocina, unas instalaciones para los trabajadores y unos baños para la cafetería de la planta baja”, describe el promotor de Goien Botique Hotel, donde no prevén ofrecer servicio de restauración abierto al público. “Queremos que el huésped se encuentre como en su casa, que no tenga que convivir con las personas de fuera”, indica. A partir de ahí, el edificio suma cuatro plantas, cada una de ellas con cuatro habitaciones; tres dobles y una individual. “Están todas decoradas en la misma línea, pero cambiando pequeños detalles”, afirma. En la quinta planta, que está retranqueada, hay dos habitaciones, que son más grandes y tienen terrazas. En total, suman 18 habitaciones.

Esta nueva oferta vendrá a dar servicio a la creciente demanda turística de la ciudad. Entre junio y septiembre, 454.828 turistas visitaron Bilbao, un 3,6% más que en el mismo período de 2022, hasta entonces el mejor dato de la serie histórica. En ese sentido, el Casco Viejo, además de ser una de las zonas de visita indispensable, también es uno de los emplazamientos favoritos para alojarse. De ahí que en los últimos años hayan abierto varios establecimientos como el Hotel Tayko (2019), el Hotel NYX (2019) o el Bilder Botique Hotel (2022). Además, a escasa distancia del Goien Botique Hotel, al otro lado de la ría, en otoño de 2024 abrirá sus puertas el establecimiento de la cadena hotelera dirigida al público LGTBIQ+ Axel Hotels, que continúa las obras en su edificio de La Merced.