Y ya van diez ediciones de reconocimiento a las mujeres tecnólogas por parte de la Universidad de Deusto. En esta ocasión, la entrega de los premios ha tenido lugar esta mañana en Madrid siendo las galardonadas la sevillana María José Escalona Cuaresma, en la categoría senior, y la leonesa Sara García Alonso, en la categoría menor de 35 años.

El galardón tiene como objetivo fomentar las vocaciones femeninas en el campo de la investigación y el desarrollo tecnológicos, prestigiar la importancia de la tecnología en todos los ámbitos de la vida y en el desarrollo social, y dar valor al trabajo y los logros que el desempeño de estas tareas y estudios por parte de las mujeres han aportado a la humanidad.

 Al acto han asistido el decano de la Facultad de Ingeniería, Asier Perallos; la secretaria del Ministerio de Ciencia e Innovación, Teresa Riesgo; la diputada foral de Empleo, Cohesión Social e Igualdad, Teresa Laespada; así como otros representantes de la Universidad y de entidades públicas y privadas que apoyan este premio.

María José Escalona, catedrática de la Universidad de Sevilla adscrita a su departamento de Lenguajes y Sistemas Informáticos, es una especialista en investigación de la ingeniería del software y de requisitos y, en general, en el software centrado en las personas. Obtuvo su doctorado con mención internacional en 2004 y desde entonces ha desarrollado más de 200 publicaciones en foros internacionales y nacionales. Ha dirigido y tutorado diversas tesis doctorales y diversos proyectos de investigación de ámbito nacional e internacional.

Por su parte, el premio joven, Sara García Alonso, investigadora titular en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y miembro de la reserva de astronautas de la Agencia Espacial Europea (ESA), es licenciada en Biotecnología por la Universidad de León y, durante su carrera universitaria, se formó en varios laboratorios y realizó su máster con especialidad en Biomedicina.

En 2019, se unió al laboratorio del doctor Mariano Barbacid en el CNIO, donde ha realizado avances significativos en el estudio del adenocarcinoma de pulmón impulsado por KRAS, pero sobre todo es conocida porque En 2022 fue seleccionada como astronauta de reserva en el Cuerpo Europeo de Astronautas, convirtiéndose en la primera mujer española en lograrlo.

El decano Asier Perallos, ha destacado en su intervención como “las Universidades tenemos la obligación de atender los retos y los desafíos a los que se enfrenta la sociedad, y estar atentos a las necesidades y peticiones de las empresas para adaptarnos a ellas". En este sentido ha indicado como en la universidad bilbaina "tenemos cada curso quince mil alumnos, repartidos en 46 grados universitarios; y una de nuestras facultades es la de Ingeniería, que lleva más de 40 años formando profesionales en continua escucha con la empresa, que necesita más ingenieros e ingenieras, y cuya demanda es uno de los objetivos de este galardón que entregamos por primera vez en Madrid”. Asier Perallos ha remarcado que “la ciencia y la tecnología son la base de nuestro futuro, y el ejemplo de nuestras premiadas servirá como estímulo para que otras muchas sigan por este camino”.

160 candidatas

En su X edición, el premio Ada Byron a la Mujer Tecnóloga ha superado todos los récords al recibir y evaluar 166 candidaturas. Las candidatas representan un abanico de talento y habilidades en el ámbito tecnológico en España. Estas mujeres han demostrado un compromiso sobresaliente en sus respectivas áreas, contribuyendo significativamente a la innovación y al progreso tecnológico. Entre sus perfiles cabe destacar su dilatada producción científica e investigadora, su compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, divulgación, y su vocación por la mejora de la salud humana y ambiental a través de la tecnología.

A la cita también han acudido varias premiadas en ediciones anteriores como Asunción Gómez, galardonada en 2015 y recientemente nuevo miembro de la Real Academia de la Lengua; Concepción Monje, Premio Ada Byron 2019; y Laura Lechuga, reconocida hace tres años y Premio Nacional de Investigación.