Desde mañana los vecinos y turistas que pululan por el Casco Viejo tendrán algo menos de ruido y respirarán un poco mejor gracias a una prueba piloto activada por el Ayuntamiento de Bilbao y la marca de cerveza Heineken. Será posible gracias a la entrada en servicio de dos motocarros eléctricos especialmente diseñados para distribuir entre los establecimientos hosteleros de las Siete Calles cerveza en barriles y otros productos de la firma. Ello evitará que el reparto se lleve a cabo como hasta ahora con un camión con motor a combustión y que molestaba mucho más a residentes y transeúntes.

La iniciativa ha sido presentada esta mañana de martes por la concejal de Movilidad y Sostenibilidad, Nora Abete y el director de Relaciones Institucionales de Heineken, Pablo Mazo. La edil ha especificado que "trabajamos para facilitar los procesos de carga y descarga y hacerlo de una manera sostenible como es este caso". El objetivo último es, según Abete, conseguir que "nuestra ciudad sea más verde, accesible y respetuosa con el medio ambiente". También ha indicado que "esta fórmula de distribución urbana va a ayudar a que la convivencia sea mejor en el Casco Viejo"

Locales beneficiados también

Van a ser más de 200 locales hosteleros los que se beneficiarán de este nuevo sistema logístico. Consistirá en que el camión con decenas de barriles de cerveza que antes circulaba por las calles del Casco Viejo ya no entrará a su interior. Desde mañana llegará hasta un punto que tiene la firma al lado del mercado de la Ribera, el denominado como ruptura de carga, donde depositará la mercancía en los vehículos eléctricos que harán todos los viajes lanzadera necesarios hasta distribuir la carga diaria. Cada vehículo puede portar hasta 8 barriles de cerveza,

Pablo Mazo ha explicado que con este sistema "se prevé evitar la emisión a la atmosfera de 1.650 kilos de CO2 al año en el Casco Viejo". Además supondrá "ayudar a cuidar el planeta y de nuestro entorno y a que nuestro clientes sean más sostenibles".

"Esta fórmula de distribución urbana va a ayudar a que la convivencia sea mejor en el Casco Viejo"

Nora Abete - Concejal de Movilidad y Accesibilidad del Ayuntamiento de Bilbao

Nora Abete ha indicado que esta prueba piloto carece de fecha de caducidad y se mantiene en los mismos horarios de carga y descarga permitidos en la actualidad en la zona donde los peatones son prioritarios.

En cuanto a la ampliación de esta fórmula mucho más sostenible a otras marcas y mercancías, la edil de Movilidad ha especificado que "esta es nuestra primera experiencia con un punto de ruptura de carga fomentando la distribución con vehículos eléctricos y nuestra idea es que luego podamos trasladar a otras zonas de Bilbao y otro tipo de locales".

El responsable de Heineken explica a Nora Abete explica las características del vehículo eléctrico especialmente diseñado para esta función. Oskar Gonzalez

Bilbao no es la primera ciudad donde Heineken está llevando su distribución urbana de mercancías de última milla por medio de pequeños vehículos eléctricos. Ya está implantada con éxito en Málaga y Sevilla, y está en proceso de prueba en zonas de Madrid, Ciudad Real, Sitges o Port Aventura.