Para un niño no hay nada mejor que abrir una puerta y descubrir un mundo mágico. Roberto San José lo sabe, y por ello ha creado en Bilbao Roqueland, un universo de fantasía y diversión basado en las maquetas. Su pasión por estos mundo en miniatura viene desde que era pequeño, ya que le permitían vivir aventuras en nuevos mundos creados por él.

Sin embargo, su profesión nada tiene que ver con su pasión. Es charcutero y en 1998 fundó en Galdakao la Delicatessen Roquechar donde no dudó en instalar un pequeño espacio para sus maquetas. “Entendí que faltaba un espacio para los niños, así que reservé un espacio en el escaparate y monté ahí la primera maqueta que expuse al público”, cuenta.

Roqueland, un mundo de fantasía a escala en Bilbao

Roqueland, un mundo de fantasía a escala en Bilbao Pablo Viñas

Al ver que su creación de una ciudad en miniatura rodeada por un tren en movimiento dejaba atónitos a los niños que se acercaban decidió crear un mundo completo para ellos dejando salir de un trastero su magia. En la calle Fontecha y Salazar de Bilbao decidió crear este universo en el que niños y niñas pueden interactuar con diferentes mundos. Una veintena de maquetas que antes ocupaban un trastero son hoy Roqueland.

Además de ciudades y mundos en miniatura en vitrinas, este espacio de más de cien metros cuadrados, al que se puede acceder por 3 euros, cuenta con una gran maqueta en la que hay dinosaurios, un circuito de coches y hasta un camping con pequeñas sillas para que los más pequeños puedan jugar.

APOYO FAMILIAR

Según asegura este charcutero, su sueño de crear Roqueland no hubiera sido posible sin su familia. “Mi hija diseña el espacio y mi mujer hace los jardines. Me ayudan mucho. Era muy arriesgado crear este mundo pero con apoyo familiar ha sido posible”, asegura.