Los magistrados Aner Uriarte y Teresa Montalbán se disputarán hoy el decanato de Bilbao en las elecciones a las que están llamados a votar un total de 57 jueces titulares de los órganos unipersonales de la capital vizcaina.

Tres de los grandes retos a los que tendrá que hacer frente el nuevo juez decano serán la implantación de la Nueva Oficina Judicial (NOJ) en Bilbao, del expediente digital con el sistema Avantius y la reordenación de juzgados, con la apertura en 2025 del nuevo Palacio de Justicia del denominado edificio Mapfre, que fue adquirido por el Gobierno vasco.

Aner Uriarte Codón, el actual juez decano de Bilbao, de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), aspira a su tercer mandato en estas elecciones, en las que también se presenta Teresa Montalbán Gómez, magistrada del juzgado de lo Social número 5 y asociada a Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD).

Ambos aspirantes han comunicado a los jueces del partido judicial por escrito su programa de actuación, a los que ha tenido acceso Europa Press, en los que coinciden en la necesidad de reclamar más recursos.

En concreto, Uriarte destaca que “la falta de medios, recursos y juzgados constituye un mal endémico” en la carrera judicial. En todo caso, se muestra convencido de que “el verdadero caballo de batalla” al frente del decanato será la Nueva Oficina Judicial, cuya implantación en Bilbao ve con “preocupación”.

En este sentido, subraya que “los ejemplos que se han vivido en el País Vasco desde su implantación no han sido buenos para los jueces” y han generado “situaciones de tensión entre compañeros y letrados de la administración de justicia u otros compañeros”. Según indicó, han supuesto “un empeoramiento” de las condiciones en los que trabajaban los miembros de la Judicatura con “el modelo clásico”, todavía vigente en la capital vizcaina.

Por su parte, Montalbán se marca, entre otros objetivos, promover “ante cualquier instancia la urgente necesidad de actualizar las cargas de trabajo” que soportan los jueces, “con especial atención a los compañeros en situación más precaria”. En cuanto a la implantación de Avantius y otras novedades informáticas que puedan implementarse, afirma que quiere que los titulares de los juzgados “obtengan una respuesta ágil y, en todo caso, lo más inmediata posible, a los problemas generados por el sistema en su práctica profesional”.

También subraya que la NOJ va a suponer “un cambio determinante” en la forma de trabajar, por lo que cree “imprescindible” contar con la colaboración de los jueces para conocer propuestas, planteamientos y quejas. Además, plantea la necesidad de “coordinar a todos los implicados”.