Bilbao ha puesto en marcha un servicio de apoyo digital que ayudará a realizar gestiones on line los colectivos con más dificultades para moverse por internet. Los puntos de acompañamiento están ya abiertos en los centros de distrito de Rekalde, Otxarkoaga, Santutxu, Zorroza y San Inazio, además de un sexto que será itinerante y que prestará servicio, entre otros en el albergue de Elejabarri.

El objetivo de esta iniciativa, que funcionará a modo de experiencia piloto hasta final de año, es reducir la brecha digital que sufren algunos colectivos, como pueden ser las personas mayores, las que tienen dificultades de comprensión, con menor nivel en formación académica o económicamente más desfavorecidos. "Queremos ayudar y acompañar a los colectivos que más dificultades tienen para acercarse al mundo digital. Se trata de que todas las personas podamos acceder a la digitalización, ya que muchas veces no tenemos las capacidades necesarias para movernos por el mundo digital que hoy día está tan presente en nuestras vidas", ha destacado el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, en la visita que ha realizado este miércoles al punto del CMD de Rekalde, acompañado de los concejales de Atención y Participación Ciudadana, Oihane Agirregoitia, y Acción Social, Iñigo Zubizarreta, además de otros miembros de la corporación municipal.

En horario de 9.00 a 13.00 y de 16.30 a 19.30 horas, los ciudadanos que necesiten ayuda para configurar su móvil, realizar un trámite administrativo o quieran subir fotos a la nube podrán acercarse a estos puntos, donde personal formado se encargará de aclarar las dudas o dificultades que presenten los usuarios y se asegurará de que las gestiones que tengan que realizar se tramiten de forma adecuada.

Formación a demanda

El servicio ofrecerá también formación a demanda en cuestiones relacionadas con las nuevas tecnologías a colectivos que lo soliciten, tanto en los mismos puntos o en otros espacios como KZgunes e incluso locales de entidades y asociaciones de colectivos que la pidan.

Al finalizar el año -el servicio se puso en marcha el pasado 19 de septiembre-, el Ayuntamiento realizará un balance de cómo han funcionado los puntos de apoyo, pudiendo ampliar o modificar tanto los espacios, incluso extendiéndolo a otros barrios de la ciudad, como los horarios en función de la demanda. Hasta entonces, el Ayuntamiento calcula que atenderá a unas 2.000 personas y formará a otras tantas.