El Ayuntamiento sigue impulsando el Ensanche de Bilbao. Si María Diaz de Haro está ya en obras para su modernización y el entorno de La Casilla cuenta con hoja de ruta para su actualización, ahora le toca el turno a la calle Rodríguez Arias.
El alcalde de la villa, Juan Mari Aburto ha presentado este martes el proyecto para convertir esta arteria urbana que corre en paralelo en la Gran Vía en el nuevo corredor comercial de la villa. Para ello "se incrementará en un 50% el espacio peatonal existente en la actualidad", ha desvelado el alcalde.
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Para ello se reducirá a un carril los dos actuales para el transito de vehículos, salvo en el tramo entre Marqués del Puerto y Elcano, y el tráfico se tranquilizará aunque en todo momento se dejará paso a portales y garajes. Todo ello supondrá que los comercios actuales tengan mucha más exposición y las lonjas ahora vacías tengan más posibilidades de ocuparse. Se aprovechará la captación de espacio al asfalto en los cruces con todas las calles de Rodríguez Arias para convertirlas en zonas estanciales con bancos y jardineras.Para los flujos del TAV
Pero hay más. El alcalde ha asegurado que también "es un proyecto de ciudad". El proyecto incluye el diseño integral de esta arteria que, junto con una futura actuación en las calles Gardoqui y Padre Lojendio, servirá para que recoger los flujos de personas "procedentes de la futura estación del TAV en Abando", ha explicado el primer edil.
De todas formas no se va a efectura los trabajos de actualización a la vez en el kilómetro largo de calle que discurre entre Sabino Arana y la calle Gardoki. El proyecto se va a desarrollar por tramos, siendo el primero en acometer el ubicado entre la plaza Campuzano y la alameda de Rekalde.
Un proyecto que se sacará a licitación en unos días y que tras su adjudicación comenzará los trabajos tras el verano, según ha especificado Asier Abaunza, concejal de área de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos.
El presupuesto máximo será de 2.85 millones de euros y con el plazo estimado de obras se prevé que el tramo esté finalizado para la primavera del próximo 2023. Hay que destacar que el Ayuntamiento de Bilbao recibirá para este proyecto casi 620.000 euros de subvención europea incluida en los fondos Next Generation.
