Bilbao - El parque de vivienda social auspiciado por el Ayuntamiento dará un estirón en el próximo bienio con la incorporación de 205 nuevas viviendas y apartamentos dotaciones en las zonas de Bolueta y Ametzola. Un paquete residencial en régimen de alquiler que se sumará a los 4.132 hogares que en la actualidad gestiona la sociedad Viviendas Municipales (VV.MM.) de Bilbao y que tiene un doble objetivo.
Lo explicó ayer el concejal de Vivienda, Goyo Zurro, junto a Jerónimo Escalera, el presidente de la Asociación de Gestores Públicos de Vivienda y Suelo del Estado cuya asamblea se inauguró en Bilbao. Zurro indicó que además de la lógica razón de atender las necesidades de las personas con recursos escasos se pretende “conseguir mover el mercado para que bajen los precios de alquiler que, según una estadística conocida hoy mismo, han subido en el último año doce veces más que el salario medio en España”.
La entidad municipal espera entregar en alquiler los pisos de Bolueta a principios del año próximo, una vez culmine el convenio firmado con el Gobierno vasco. Y es que estas viviendas se encuentran en el rascacielos de color negro que ha construido Lakua para albergar viviendas de protección oficial y que se empezarán a escriturar con los beneficiarios particulares a partir de septiembre.
La otra oferta de alquiler se ubica en un edificio que está levantando el Ayuntamiento en la zona de Ame-tzola. El concejal bilbaino explicó las características especiales de estos 160 apartamentos dotacionales que se están construyendo en dos fases. Indicó que “son recursos residenciales con menos metros cuadrados, aproximadamente 35, que incorporan cocina, dormitorio, baño y salón, y cuentan con una serie de servicios comunes como lavandería, zonas de estar o trasteros”. Esta apuesta municipal de envergadura con esta fórmula se ha tomado después de analizar la buena experiencia de otros veinte apartamentos en el mismo régimen que funcionan en Miribilla. Una oferta que es limitada ya que “los contratos de arrendamiento son para cinco años y no se puede repetir, ya que buscamos una rotación en la ocupación del apartamento”, especificó Goyo Zurro.
Pero VV.MM. no solo tiene en mente construir nuevos pisos para que crezca la oferta social. Reconociendo que en “Bilbao el suelo es escaso” el concejal propuso “tener imaginación, innovar con nuevas fórmulas para ir movilizando cada vez mayor número de viviendas deshabitadas que no están cumpliendo su labor social”.
Según el último informe municipal sobre vivienda vacía, en la villa existen un total de 5.453 residencias sin ocupar que suben a las 8.722 si se suman los pisos sin empadronamiento y consumo de agua bajo. Esta última cifra supone un 5,37% de las 162.560 censadas hace año y medio.
El edil consideró un reto para las administraciones, “no solo locales sino también autonómicas” activar este parque deshabitado. En este sentido, recordó que “la apuesta por parte del Gobierno vasco con Bizigune, para incentivar el alquiler de pisos, más el nuevo programa Gaztelagun para jóvenes que promocionará el alquiler privado. Va a suponer ese movimiento que el mercado necesita en Euskadi y en Bilbao”.
Coincidió en su tesis el presidente de la AVS, Jerónimo Escalera, que reivindicó cómo la asociación procura “un parque público que tiene que contar con un apoyo más importante desde el Gobierno central con el objetivo de que las personas que están en exclusión social puedan acceder a estas viviendas”. Aportó un indice demoledor. “El dinero destinado a viviendas sociales es el 0,06% del PIB, cuando tendría que llegar al menos al 1% en consonancia con otros países de la Unión Europea”.
Escalera y Zurro participaron ayer con los cerca de 150 integrantes de la asamblea en el recorrido que hicieron por Zorrotzaurre para conocer de primera mano las intervenciones de vivienda social que tendrán como escenario la futura isla y la margen derecha del canal, donde ya se están levantando los primeros bloques de precio tasado y VPO.