Bilbao revisa la seguridad ante las fiestas y envía un mensaje de "tranquilidad"

BILBAO. Aburto ha lanzado este mensaje tras la concentración llevada a cabo este mediodía ante el Ayuntamiento de Bilbao en señal de condena por los atentados, a la que, junto a las autoridades, se han sumado más de 300 ciudadanos, más que en otros actos de este tipo en rechazo de otras acciones terroristas.

El alcalde ha querido transmitir a la ciudadanía un mensaje de "tranquilidad desde la responsabilidad" y ha señalado que en Bilbao se están tomando las medidas "adecuadas" al actual nivel 4 de alerta terrorista.

"No hay un riesgo específico en Bilbao, pero estamos ante un momento de gran concentración de personas y estamos ocupados pero no preocupados", ha añadido Aburto en relación con las fiestas de la Aste Nagusia bilbaina, que comienzan el sábado y cuyo programa se mantiene, al igual que en las presentes fiestas de Donostia, según han informado fuentes municipales de la capital guipuzcoana.

"Hemos tomado nuestras medidas y hoy se están volviendo a revisar de la mano del departamento de Seguridad", ha destacado el regidor.

Ha puesto de relieve que no se puede "generar una alarma indiscriminada" y ha afirmado que, en la Semana Grande, la ciudadanía de Bilbao y quienes visiten la ciudad "van a poder disfrutar de las fiestas".

"Que la gente disfrute de las fiestas, y decimos esto también desde la responsabilidad", ha agregado Aburto.

Ha transmitido a Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, con la que conversó ayer, al pueblo catalán y a "cada una de las víctimas" su "solidaridad y cercanía".

"En estos momentos nos sentimos como víctimas de este hecho, esa amenaza terrorista, de la sinrazón del terrorismo", ha añadido el alcalde bilbaíno.

Aburto ha participado en la concentración del Ayuntamiento junto al diputado general de Bizkaia, Unai Rementería; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Euskadi, Juan Luis Ibarra, y el decano de la Junta Directiva del Cuerpo Consular de Bilbao, Marian Popescu, además de ediles de todos los grupos del consistorio y junteros vizcaínos.

Junto a las autoridades, en las escalinatas del ayuntamiento, y enfrente de la casa consistorial se han situado más de 300 ciudadanos, una cifra superior a la que suele asistir a este tipo de actos de condena por atentados terroristas.

Entre los concentrados había una joven que sujetaba una bandera catalana con crespón y que se secaba las lágrimas al final del acto.

La concentración ha consistido en cinco minutos de silencio y ha finalizado con una prolongada salva de aplausos de los asistentes.