Bilbao. Tras casi cuatro meses ocultos por los andamios, la obra Arcos rojos, del artista galo Daniel Buren, ya deslumbra con su nuevo e intenso color sobre el puente de La Salve, y más en el lienzo gris del plomizo cielo de Bilbao de estos días. La restauración de esta pieza artística, encargada por el Museo Guggenheim hace ya una década, ha supuesto un desembolso para la pinacoteca de cerca de un millón de euros. Su renovación integral ha sido consecuencia del deterioro que acumulaba, sobre todo las placas de Formica que la conforman, las cuales han sido todas renovadas, y con motivo del veinte aniversario del museo que celebra este año. Foto: Oskar González
