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BBK Good Hostel suma 40.000 turistas en sus cinco años de vida

El albergue ubicado en Bolueta es uno de los mejor valorados por los visitantes en Internet

BBK Good Hostel suma 40.000 turistas en sus cinco años de vida

Bilbao - Maiteder Estevez, encargada del BBK Bilbao Good Hostel, recuerda la primera Semana Santa del albergue como si fuera ayer: “Había un montón de trabajo, estábamos muy agobiados”. Ayer, con los datos de ocupación del último lustro en el que han llegado a alojar a 37.658 turistas procedentes de 116 países, afirmaba con una sonrisa que desde entonces se han superado cada día. Así, este establecimiento, gestionado íntegramente por personas con discapacidad, cumple su quinto aniversario convertido en un referente en el turismo adaptado y en la contribución social. Sin embargo, lo que más enorgullece a los trabajadores del albergue, propiedad de BBK y gestionado por Lantegi Batuak, es ser uno de los alojamientos mejor valorados en las principales plataformas de reservas.

“Hacemos muchísimos esfuerzos en nuestro día a día para defender la idea de que somos cien por cien capaces. Y tengo la suerte de trabajar en un sitio en el que cuento con el apoyo de nuestros clientes”, afirmó ayer Estevez, quien aseguró que los aspectos más apreciados por los visitantes son el trato del personal, la calidad de las instalaciones y los servicios ofertados, además de la limpieza. La encargada describió el albergue como un establecimiento diferente al ser inclusivo, con “espacios de convivencia que generan relaciones” que permiten “acercar la discapacidad a la sociedad”.

Izaskun Zorrilla lleva trabajando en el hostel casi desde sus inicios. “Hacemos camas, servicios de limpieza y servimos los desayunos... De todo un poco”, aseguró esta joven, quien confesó que es muy gratificante que los visitantes les valoren tan positivamente. Lo que aún no dominan estos los trabajadores del albergue son los idiomas. “Es un poco complicado, pero hacemos lo que podemos para comunicarnos con los franceses y los ingleses que nos vienen”, expuso repitiendo algunas de las palabras estratégicas que han aprendido.

A su lado, Asier Martínez, otro de los trabajadores procedente de Basauri, puso el acento sobre buen ambiente laboral que se crea. “Hablamos nosotros porque ellas son muy tímidas”, comentaba entre risas señalando a dos compañeras que observaban a escasos metros. Desde su puesta en marcha, el hostel ha permitido la generación de 25 puestos de trabajo para personas con discapacidad que no contaban con experiencia previa en el sector de hostelería. La formación recibida en el BBK Bilbao Good Hostel ha sido un trampolín para algunos de los trabajadores, tanto que no es extraño que reciban ofertas de trabajo.

A pesar de ello, de momento no contemplan otra posibilidad laboral, sino que seguirán siendo testigos de los avatares del establecimiento. No en vano, Maiteder Estevez aseveró que “estos cinco años han dado anécdotas para escribir un libro”. De esa forma, narró cómo una vez un cliente se les presentó con un caballo: “¡No entendía por qué no podríamos alojarle!”. También rememora otra ocasión en la que un visitante de origen asiático perdió su avión y tuvo que quedarse en el hostel un fin de semana más, a la espera de que le hicieran una transferencia. Mientras tanto, como no tenía dinero, los mismos trabajadores iban proporcionándole algo de comida. “Muchas veces la dedicación va más allá de lo que es nuestro trabajo”, reconoció Estevez.

Cinco años de logros Durante este lustro, BBK Bilbao Good Hostel, con capacidad para 104 plazas, ha conseguido aumentar el volumen de entrada de viajeros años tras año. En 2016 fueron 10.237 personas las que pasaron por sus instalaciones, un 22% más que el año anterior. La mayoría de los turistas, un 68%, son estatales (con los catalanes a la cabeza, situándose en un 19%); mientras que un 38% son extranjeros (principalmente franceses, suponiendo un 23%). También destaca el creciente protagonismo de los grupos organizados, que supusieron un 60% de las reservas el año pasado. En ese sentido, es reseñable que el criterio de accesibilidad universal por el que están diseñadas las instalaciones del albergue han atraído a 34 grupos de personas con discapacidad en cinco años.

Txema Franco, director general de Lantegi Batuak, ensalzó ayer los logros de este proyecto pionero. “Se ha convertido en una plataforma para que personas con discapacidad puedan acceder a los puestos de trabajo que genera el turismo”, aseguró. A su lado, Xabier Sagredo, presidente de BBK -entidad que aportó “algo más de 1,6 millones de euros” y cedió el edificio donde se ubica el hostel- opinó que el albergue “es la demostración de que las barreras solo existen en nuestra propia percepción, cuando el único límite real que nosotros vemos son nuestros propios prejuicios”.