Bilbao - “La ciencia y la tecnología son los motores de la productividad y el crecimiento, así como las claves para lograr una sociedad competitiva”. Son las palabras del concejal de Euskera y Educación del Ayuntamiento de Bilbao, Koldo Narbaiza, durante la presentación de la Zientzia Azoka organizada por Elhuyar, que acoge este sábado la Plaza Nueva; un certamen en el que serán expuestos más de cien proyectos científicos y tecnológicos de jóvenes de entre 12 y 18 años procedentes de toda la Comunidad Autónoma Vasca y Nafarroa.

Será la tercera edición de una feria, en la que desde las 12 del mediodía hasta las 8 de la tarde, 95 grupos -sumando un total de 571 alumnos- presentarán 161 trabajos en los que han estado trabajando durante todo el año. 25 de ellos tratan sobre medioambiente y ecología, 22 sobre ingenierías y tecnologías, 21 sobre la salud, 9 sobre temas relacionados con la energía y siete que han optado por investigaciones de ciencias sociales.

“Buscamos fomentar el interés en la ciencia y que los jóvenes vivan experiencias relacionadas con el trabajo del día a día”, apuntó Leire Cancio, directora general del grupo organizador. La feria llevará la ciencia a pie de calle, ya que los jóvenes también atenderán a cualquier persona que se les acerque con preguntas o cuestiones relativas a la materia. Allí contarán con el apoyo de 150 investigadores que forman parte del personal de la UPV/EHU, Universidad Pública de Navarra, Escuela Politécnica Superior de Mondragón Unibertsitatea y de Deustotech.

La iniciativa cuenta con la colaboración de la Red de Ciencia y Tecnología del País Vasco, además del patrocinio del Ayuntamiento de Bilbao, la Diputación Foral de Bizkaia y diferentes empresas como Iberdrola o Euskaltel.

Begoña Garamendi, directora de Innovación Educativa del Departamento de Educación, definió como objetivo pedagógico el que los alumnos “lo den todo, se cuestionen el porqué de las cosas y traten de dar respuesta a los retos y desafíos del entorno”. A nivel global, el departamento quiere apostar firmemente por trabajar la educación científica desde la edad infantil, ofreciendo marcos metodológicos a los profesores para “trabajar la ciencia desde una realidad cercana”.

Garamendi enfatizó además que el aprendizaje de la ciencia, como el resto de materias debe darse en un modelo “interdisciplinar”, de tal manera que en las diferentes iniciativas del perfil de la Zientzia Azoka, “los alumnos adquieran competencias útiles para la carrera que realicen”.