Bilbao - Las antenas de Solokoetxe seguirán donde están. Es decir, sobre el tejado del ascensor que une el Casco Viejo con Santutxu. La iniciativa ciudadana que presentó la asociación de padres y madres del centro escolar de Solokoetxe para que retiren las antenas no prosperó porque desde el gobierno municipal les recordaron que el Ayuntamiento de Bilbao no tiene competencias para tomar esa decisión. Sin embargo, el pleno del Consistorio aprobó la creación de una comisión técnica que analizará el impacto de las antenas. “Vamos a actuar, no vamos a dejar pudrir el problema”, dijo el concejal de Movilidad, Transportes y Medio Ambiente del Ayuntamiento, Alfonso Gil, durante el debate de la proposición ciudadana. Para ello, se ha comprometido, tal y como aprobó el pleno, a crear “una comisión técnica de análisis y estudio del estado del espacio radioeléctrico de nuestra ciudad”. En la misma propuesta del gobierno municipal, el Ayuntamiento, “dentro del ámbito de sus atribuciones, instará a las instituciones competentes a que tengan en cuenta las recomendaciones del Parlamento Europeo en lo referente a la instalación de este tipo de antenas”. Las personas y asociaciones afectadas por las antenas de Solokoetxe llevaban mucho tiempo esperando la oportunidad que ahora les brinda el ayuntamiento a través de la iniciativas ciudadanas que ha puesto en marcha esta legislatura el equipo que lidera el alcalde Juan Mari Aburto. Así, a última hora de la tarde llegó el turno de Raquel Ahedo, miembro de la AMPA del Instituto de Solokoetxe. Expuso durante nueve minutos, cuatro más de los que tenía asignados, la “preocupación” de las familias afectadas. “Estamos en situación de riesgo según la comunidad científica”, afirmó. Por eso pidió que retiren las antenas y reprochó al Ayuntamiento que “creemos que puede hacer más”. Le contestó el concejal del Área, Alfonso Gil, que le volvió a recordar “el marco competencial” que tiene el Ayuntamiento en esta materia. “La competencia sobre la concesión del ascensor es del Gobierno vasco y recientemente nos dijeron que era impensable jurídicamente quitar las antenas”, desveló el concejal. Aun así, les dijo a los representantes vecinales de Solokoetxe, presentes en el pleno, que “vamos a trabajar por quitar ese problema”. Se comprometió también a ir la semana que viene al lugar donde está instalado el medidor que aporta los datos sobre el impacto radioeléctrico “ya que las mediciones que tienen ustedes y las nuestras no coinciden”. Los grupos de la oposición votaron a favor de la proposición vecinal de retirar las antenas. La portavoz de EH Bildu, Aitziber Ibaibarriaga, denunció que “los de la concesionaria del ascensor de Solokoetxe se han montado un negocio muy rentable”. Dijo que hay “entre 13 y 17 antenas, el billete del ascensor sigue subiendo y éste (refiriéndose al que tiene la concesión) es el jeta que nos ha dejado empantanados con el ascensor de Begoña”. Alfonso Gil señaló por último que “no hay informes concluyentes que demuestren que los efectos perniciosos en los espacios radioléctricos”. De ahí que insistiera en que “hay que hacer un estudio serio antes de que finalice el año”.
Plazuela La única iniciativa vecinal que salió adelante fue la propuesta de la asociación Euskaldunako Zubia a través de la cual se pedía dotar con el nombre de Yolanda González Martín una plazuela en Deusto. El alcalde Juan Mari Aburto se comprometió, ya que es suya la potestad de hacerlo, a darle el nombre a una plaza que existe entre los números 57 y 59 de la Ribera de Deusto. La proposición fue aprobada por unanimidad y todos los grupos tuvieron palabras emotivas de recuerdo hacia la joven Yolanda, asesinada cuando apenas tenía 18 años, por el Batallón Vasco Español. El alcalde terminó diciendo que “me comprometo en asumir con gusto la petición para que la plazuela lleve el nombre de Yolanda”.