bilbao. A partir de mañana, Bilbobus y tranvía compartirán canceladoras en el tramo que ambos comparten en la calle Autonomía. Concretamente, será en las paradas de Basurto/Aita Donosti, en dirección a La Casilla, y la de Basurto/Briñas, en dirección al hospital, donde se han instalado sendas canceladoras en las que los viajeros de ambos medios de transporte podrán validar sus creditrans, gizatrans e hirukotrans.

En estas dos paradas se acabó el ritual típico del autobús de validar sus tarjetas al entrar al vehículo y su adaptarán al modus operandi utilizado en el tranvía desde su puesta en funcionamiento y habrá que validar el billete al llegar a la parada. De esta manera, se espera que se reduzcan las colas y los tiempos de espera en parada. Agilizar la subida de pasajeros es algo especialmente importante en la situación que se dará a partir de ahora cuando autobús y tranvía compartan parte de su recorrido.

Para quienes posean alguno de estos títulos será obligatorio validar su billete antes de entrar tanto al Bilbobus como al tranvía. En el caso de agotarse el billete, la máquina expendedora les devolverá el mismo y en la propia canceladora podrán sacar un nuevo título. Mientras tanto, quienes viajen con el billete ordinario seguirán pagando dentro del vehículo, dado que las dos canceladores no aceptan dinero en efectivo.

inspectores en parada A partir de mañana, no solo comenzará la puesta en marcha de este modo de pago en el autobús, sino que también empezará el lógico proceso de adaptación de los usuarios a esta medida. Por ello, para hacer más fácil que el viajero se acostumbre a esta nueva forma de pago, durante todo el mes de abril, habrá inspectores de Bilbobus en ambas paradas. Su cometido no será otro que informar al viajero de la nueva medida y resolver las dudas que tengan los usuarios acerca del nuevo sistema.

Esta medida afectará, concretamente, a nueve líneas de Bilbobus: 18, 38, 48, 57, 58, 85, 88 y G6, que son las que pasan por alguna de estas dos paradas que desde mañana acogerán por igual a las flechas rojas de Bilbobus y al tranvía.