Refuerzo arrollador

Estudiantes51

LOINTEK GERNIKA BIZKAIA: Gómez (5), Alston (12), Pina (10), Sutherland (16), Bas (12) -cinco inicial-, Díez (11), Molina (10), Devaughn (10), Lázaro (7) y Aritimuño (8).

MOVISTAR ESTUDIANTES: Quirante (9), González (8), Menéndez (5), Pacheco (2), Baker (6) -cinco inicial-, Rodríguez (2), San Román (9), Soler (5), Velasco (0) y Ginzo (5).

Parciales: 18-4, 39-18 (descanso), 76-33 y 101-51.

Árbitros: Terreros y Hurtado. Sin eliminadas.

Incidencias: Lleno en el polideportivo Maloste.

bilbao - El Lointek Gernika necesitaba un partido como ayer. Un refuerzo moral para confiar en el trabajo diario y un encuentro cómodo, sin preocupaciones. El Movistar Estudiantes llegó a la localidad vizcaina sin conocer el triunfo en su retorno a la máxima categoría y no solo se fue en la misma situación, sufrió a un conjunto gernikarra desatado, con ganas de disfrutar de una vez por todas. El equipo dirigido por Mario López fue imparable, no encontró oposición en ningún momento y tampoco bajó el pistón cuando el viento sopló de cara. Quiso dar un golpe en la mesa y el resultado de 101-51 deja claro que el Gernika sigue muy vivo, que poco a poco va encontrando su mejor juego y está diseñado para mirar hacia arriba.

La defensa es una de las señas de identidad del Gernika. Es el baremo para valorar su estado. Cuando el aro está bien guarnecido, las gernikarras son capaces de imponer su ritmo de juego, de disfrutar al máximo sobre el parqué. El partido ante el Estudiantes sirvió para ver la mejor versión de las vizcainas este año. El conjunto estudiantil no encontró ni una vía sencilla durante los cuarenta minutos y sus porcentajes bajaron drásticamente. El 26% en tiros de dos fue el claro ejemplo de un equipo que fue incapaz de superar la telaraña defensiva del Gernika.

No hubo ni un segundo de relajación. Las locales salieron con el cuchillo entre los dientes. Al máximo de revoluciones desde el salto inicial. El Estudiantes se encontró con un equipo perfectamente plantado en la cancha y con mucho hambre. Esta mentalidad hizo que el partido quedara roto a las primeras de cambio. En el primer cuarto el Estudiantes solo fue capaz de anotar dos canastas y el 18-4 dejó una bonita base en la que edificar el partido.

El ritmo defensivo se mantuvo y en ataque primó el juego coral para ir abriendo la brecha sin parar. No hubo una dependencia clara de ninguna jugadora y el juego estuvo bien repartido entre las referencias interiores y las anotadoras exteriores. Siete jugadoras consiguieron superar la decena de puntos.

VICTORIA DE IBAIZABAL Por otra parte, el GDKO Ibaizabal sumó otra victoria más tras ganar en la cancha del Ascensores Tresa Basket Mar por 54-62. En un partido muy igualado y que solo pudo resolverse en los minutos finales a favor de las galdakoztarras.