NO es casualidad que Bahía Blanca sea considerada la cuna del baloncesto argentino. Hoy coincidirán en Fuenlabrada dos de sus más ilustres representantes. En el Bilbao Basket estará Lucio Redivo, la revelación de la pretemporada. En el banquillo local se sentará por primera vez Néstor Ché García, entrenador que debutará en Europa con 52 años después de su exitosa trayectoria en el baloncesto latinoamericano y, sobre todo, con la selección de Venezuela, a la que hizo campeona de América en 2015 y condujo a los Juegos Olímpicos de Río. “Estoy motivadísimo con esto, me siento totalmente renovado con una experiencia nueva en una competición como la Liga Endesa”, ha dicho estos días el técnico bahiense en las horas previas a su debut.
García, cuyo apodo se lo adjudicaron en Puerto Rico ya que “allí a todos los suramericanos nos consideran como al Ché Guevara”, es un entrenador de carácter, apasionado, que hizo de la selección venezolano un equipo de guerreros, aguerrido y peleón, y que quiere hacer lo mismo en el Fuenlabrada. “Yo también soy aficionado y fanático de otros equipos, sé lo que quiere un aficionado, que su equipo entregue todo y ganar. Por supuesto, pediré paciencia, pero sé que este equipo que tengo el placer de dirigir se va a identificar mucho con los aficionados”, dice el argentino como apunte de su forma de entender su profesión. “Festejo o me enojo muchísimo porque lo siento, vivo mucho y soy de entregarme mucho a la gente que cree en mí, que me contrata”, añade Néstor García, que quiere que su equipo “se lo ponga difícil a cualquiera que compita con él”.
Normalmente, eso ha caracterizado, sobre todo en casa, al equipo fuenlabreño, que celebra su vigésima temporada en la ACB y que ha armado para la ocasión una plantilla que puede cumplir con los deseos de su nuevo entrenador. A la consolidación de Rolands Smits, ya fichado por el Barcelona y que estará este año cedido en el Fuenlabrada, se ha unido la calidad física de Gabi Olaseni, pívot que destacó con Gran Bretaña en el Eurobasket, y de Christian Eyenga, antigua promesa en la posición de alero en el Joventut, donde coincidió con Pere Tomàs y Carles Duran.
El alero congoleño debe ser una de las figuras de este nuevo Fuenla que tiene otras conexiones con el Bilbao Basket: Tabu jugó allí su mejor temporada en la ACB antes de llegar a Bilbao y Sergio Llorente, que el curso pasado tuvo un papel secundario como hombre de negro, se ha ganado un hueco en los planes de García por su buena pretemporada. El técnico de Bahía Blanca ha incorporado también a otro de sus hombres de confianza con Venezuela, el base Gregory Vargas, para tratar de acortar su adaptación al equipo y la del equipo “a una nueva voz, a manera de distinta de ver el baloncesto”.
Veteranos como Marko Popovic, a quien el argentino convenció para seguir, Blagota Sekulic o Ian O’Leary o el mexicano Paco Cruz, bien conocido por Ché García, también tendrán mucho peso en un conjunto que quiere ser agresivo y versátil. “Me parece que tengo unos jugadorazos, muy comprometidos, y tengo que ser capaz de desarrollar el potencial de nuestro equipo”, ha dicho el nuevo técnico del Fuenlabrada antes de dejar su lema principal: “No estamos conociendo aún , pero todos tienen clara la idea que tenemos de que no hay nadie más importante que el equipo”.