La maldición de Derrick Rose

bilbao - La maldición volvió a posarse sobre Derrick Rose y sacudió a la NBA. El base de los Chicago Bulls y campeón del mundo con Estados Unidos en 2014 se ha lesionado de nuevo en el menisco de su rodilla derecha y tendrá que pasar por el quirófano. El periodo de baja no está definido. La lesión no parece tan importante como la última que sufrió, pero hay quienes se han puesto en lo peor habida cuenta del historial que arrastra en los tres últimos años el que fue MVP de la NBA en la temporada 2010-11.

Durante el play-off de la campaña siguiente (2011-12) se rompió el ligamento cruzado de la rodilla izquierda lo que le llevó a perderse todo el curso siguiente, el 2012-13. En noviembre de 2013, tras solo diez partidos jugados, se rompió por primera vez el menisco de la rodilla derecha y no reapareció hasta los partidos de la Copa del Mundo celebrados en septiembre en Bilbao. En la presente temporada, Rose ha disputado 46 encuentros y se ha perdido once.

Aunque algunos de sus números en esta campaña sean los peores de su carrera, el base de los Bulls parecía haber recuperado su estilo de juego explosivo y de una exigencia física enorme. Su mejoría hacía concebir esperanzas a la franquicia de Chicago de llegar lejos en la temporada. Ahora, el nuevo percance ha dejado en shock a toda la NBA que lamenta la desgracia que persigue a un jugador que estaba llamado a marcar un época y reza por su completa recuperación. Quizás a su regreso, que los más optimistas sitúan para el play-off que arrancará en menos de dos meses, Derrick Rose, que solo tiene 26 años, debería pensar en reinventarse, en adoptar un estilo de juego mucho menos agresivo para sus articulaciones. Eso y no otra cosa es lo que hizo Michael Jordan, el ídolo de su infancia en Chicago. - R. C. R.