bilbao - El Bilbao Basket se había hecho ilusiones de poder contar en breve con toda su plantilla disponible por primera vez en la temporada, pero no va a poder ser. Axel Hervelle se perderá al menos el próximo mes y medio por culpa de una fractura espiroidea del cuarto metacarpiano de la mano derecha que sufrió el pasado miércoles y de la que será operado hoy mismo por los doctores Astobiza y Gaviria de la unidad de mano de Mutualia, el mismo equipo que intervino la pasada campaña a Raúl López. Esto significa que el ala-pívot de Lieja, salvo que acelere mucho los plazos de recuperación, no podrá estar disponible para la Copa que se celebrará dentro de un mes. Pero esas seis semanas es el tiempo mínimo estimado, como ya ocurrió el año pasado con el base de Vic.

Esta noticia ha supuesto un jarro de agua helada para el jugador, el equipo y los aficionados en un momento de gran ilusión ya que se atisbaba el pronto regreso a Dairis Bertans que también ha estado un mes fuera del equipo por un percance muscular. Las lesiones no han abandonado a los hombres de negro desde que se inició el curso. Así, la ausencia de Axel Hervelle llevará al Bilbao Basket hasta el mes de marzo sin estar al completo en ningún partido, pese a lo cual los resultados deportivos están siendo inmejorables. El propio jugador belga ya se perdió los encuentros de la sexta y séptima jornadas por problemas musculares, pero esta lesión podría obligar a plantearse algunas cuestiones en relación a la plantilla.

La principal, si el papel de Germán Gabriel, en tanto no alcance un acuerdo para la rescisión de contrato, no va a tener que ser más importante. La baja de Hervelle, clave en la propuesta defensiva de Sito Alonso, deja la posición de cuatro con la única aportación de Ethan Wragge, que en las últimas semanas había visto reducidos sus minutos, y lo que pueda aportar Álex Mumbrú. Para un partido puede encontrarse algún parche, pero este último accidente ha creado una vía de agua que habrá que tapar durante al menos un mes y medio.

La Copa aún está lejos, pero antes hay que visitar el domingo al líder Unicaja, sobrado de calidad en el juego interior, y después llegarán unos cuantos duelos ante rivales de la parte baja de la tabla en los que el Bilbao Basket podría encarrilar su clasificación para el play-off por el título. Pero está claro que el equipo bilbaino no puede tener una semana tranquila para explorar cuál es el tope de su rendimiento y disfrutar sin sobresaltos de su excelente cosecha de resultados.