Un equipo generoso en casa con su baloncesto
El Bilbao Basket regala victorias por navidades a una afición que ha vuelto a convertir Miribilla en una fiesta
EL Bilbao Basket ha ocupado las navidades en repartir felicidad a todos sus seguidores de forma generosa. En unas fechas siempre complicadas porque la mente puede caer en la tentación de distraerse en los festejos, los hombres de negro han derribado todos los tópicos y han sumado tres victorias consecutivas que les han colocado en la Copa. La de ayer ante el Barcelona convirtió el Bilbao Arena en una fiesta multitudinaria. Los aficionados tenían que pellizcarse porque era la primera vez que veían a su equipo ganar como local a los dos gigantes de la Liga Endesa en la misma temporada.
Aún permanecía en el recuerdo el brillante triunfo ante el Real Madrid cuando ayer logró el Bilbao Basket otro igual de espectacular para demostrar que después de quince jornadas su tercer puesto no es ninguna casualidad, que detrás de él hay trabajo y talento, en la cancha y en el banquillo. El mate de Dejan Todorovic es una imagen para la posteridad, pero el esfuerzo de todo el colectivo está, probablemente, representado en la figura de Quino Colom, que reconoce que vive “el mejor momento de mi carrera”. “Todo se acentúa porque estamos ganando y disfrutando y Miribilla cada día está más lleno”, comentó tras el partido.
El base andorrano se estrenó ayer como MVP de la jornada con una actuación que Sito Alonso calificó de “soberbia” y que si no es la mejor de su carrera andará cerca. Colom logró 21 puntos, con 5 de 12 en tiros de dos, 3 de 3 en triples y 2 de 2 tiros libres, cogió tres rebotes, repartió seis asistencias y robó dos balones para sumar 26 puntos de valoración. Al margen de que esos números lanzaran a su equipo a la victoria, el mayor valor de la actuación de Quino Colom fue que guardó lo mejor para el último cuarto en el que dominó el partido, primero ante Satoransky y luego ante Marcelinho. En esos diez minutos aportó 9 puntos, 1 rebote, 2 asistencias, 1 recuperación y 11 de valoración.
“Estoy muy a gusto en el equipo. Sito Alonso me da mucha confianza y tengo compañeros de mucha calidad. Ha sido un día muy raro para mí porque he tenido que lanzar más de lo normal y me han entrado. Ha sido muy importante porque el partido se ha decidido al final y sabe muy bien, y más aún al hacerlo contra el Barça”, añadió un jugador del que el técnico está sabiendo sacar lo mejor, como de varios otros. Porque, con un día solo discreto de los veteranos, los demás se encargaron de sacar adelante el partido, lo mismo que ocurrió contra el Real Madrid, por lo que ya no cabe apelar a la casualidad.
talento joven Dejan Todorovic dejó claro, no solo por su espectacular mate, que en la Liga Endesa hay que empezar a contar con él y Marko Todorovic no desentonó ante quienes fueron su técnico y sus compañeros en las últimas temporadas. “Está jugando muy bien y, aunque aún tiene muchas cosas que mejorar, lleva una muy buena progresión”, comentó Xavi Pascual, el entrenador que desde la distancia está vigilando a un jugador que, en teoría, debería vestir de nuevo de azulgrana la próxima temporada y que ya ha sido también dos veces MVP semanal. De momento, toca disfrutarlo en Bilbao como hicieron ayer la multitud de niños que esperaron a la salida de los jugadores que ya no ven caras largas, sino sonrisas de oreja a oreja, entre quienes acuden a firmarles autógrafos y hacerse fotos.
Miribilla vuelve a ser una fiesta para el baloncesto a la que asistieron el alcalde Ibon Areso y Sabin Anuzita, su concejal de Deportes, y JR Holden, mítico base estadounidense del CSKA Moscú y de la selección rusa, presente en el Bilbao Arena como ojeador de los Detroit Pistons. Encantado de lo que vio “en un pabellón perfecto para el baloncesto”, quizás tachó unos nombres de su agenda y subrayó otros. Porque ayer los que vestían de negro, pese a no estar al completo, se pusieron de nuevo a la altura de uno de los grandes y cambiaron golpe por golpe hasta llegar a un final equilibrado en el que de nuevo salieron triunfadores por coraje y calidad.
La clasificación para la Copa ya es un hecho, hay que mirar dos veces la clasificación para comprobar que es cierta, pero el Bilbao Basket no se va a conformar con eso. Dentro y fuera del equipo existe la sensación de que el baloncesto le debe una temporada entera a la marea negra y todos quieren cobrársela con creces. Los jugadores están poniendo su máximo esfuerzo y el público les va a llevar en volandas hasta donde sea. 2015 tiene que ser a la fuerza mejor que lo anterior.