bilbao - A lo mejor a la undécima va la vencida. Cada visita del Bilbao Basket a Las Palmas de Gran Canaria ha sido sinónimo de derrota, la mayoría de ellas bastante abultadas y sin importar el horario ni las condiciones en que llegaran ambos equipos. Tomar el camino hacia el Centro Insular de Deportes era para los hombres de negro como dirigirse al matadero. Pero hoy su autobús no se dirigirá hacia el maldito CID, sino hacia el reluciente Gran Canaria Arena que puede rivalizar con el Bilbao Arena, por tamaño y estructura, como una de las mejores canchas para ver baloncesto en la Liga Endesa.
Ya se sabe que las estadísticas están para romperse y quizás el cambio de escenario propicie que la historia dé un giro. Con tales precedentes, todo el mundo asumiría como normal otra nueva derrota ante el Herbalife Gran Canaria en una isla nada afortunada del Bilbao Basket, que además jugará sin Álex Mumbrú y Axel Hervelle, los dos jugadores que mejor encarnan los valores que vienen al equipo desde que ambos están en la plantilla. De esto no hay precedentes porque el Bilbao Basket nunca ha jugado sin sus dos mascarones de proa, que no son tipos que huyan de sus responsabilidades, al contrario. Si están fuera es porque no queda más remedio.
Por eso, la gran incógnita es saber cómo va a reaccionar el conjunto de Sito Alonso a dos bajas tan importantes. El técnico suele repetir que a él solo le preocupan los que están disponibles, pero a la fuerza tendrán que dar los jóvenes compañeros de Mumbrú y Hervelle un paso adelante en personalidad, en carácter y en acierto. Porque será difícil sostenerle el partido a los de Aíto García Reneses a un marcador bajo. Aunque no se genere el ambiente que había en el CID, la cancha grancanaria aprieta cuando ve las debilidades del rival y lanza a los suyos, que tampoco andan cortos de calidad.
El veterano técnico madrileño ya ha conseguido reconducir los malos resultados del inicio y el Herbalife Gran Canaria llega al duelo de hoy con dos triunfos consecutivos, que son cinco si se les suma los de la Eurocup, en la que los amarillos están invictos. Los problemas físicos también afectan al cuadro insular y es algo que preocupa a Aíto porque “te frena la progresión”.
sin agobios “Tenemos mucho margen de mejora, todo el que nosotros queramos. Quiero colaborar en ello. Sí que en un momento determinado vemos que la mejora se va plasmando, pero por una parte tenemos esta dificultad de las lesiones y de por medio hay partidos que son importantes, aunque tenemos la ventaja de que la clasificación a Copa no nos agobie”, comentó en la previa el entrenador con más partidos dirigidos en la historia de la ACB.
En cualquier caso, Aíto García Reneses espera que su equipo “pueda jugar a tope, que es lo que importa” con los jugadores que estén disponibles. El Herbalife Gran Canaria aúna experiencia, juventud y calidad en una plantilla larga, compensada y bien armada en el juego interior, donde el Bilbao Basket puede ser hoy más vulnerable. Por eso, Sito Alonso tendrá que contar de nuevo con Germán Gabriel, ese jugador al que fuera del vestuario han colocado en el ojo de un huracán que él no ha provocado.
El de Caracas, mientras termina de ver satisfechos lo que considera legítimos derechos, está trabajando en Miribilla como uno más, sin levantar la voz por su situación dentro de la plantilla. Lejos de suponer un problema, Gabriel es hoy necesario para cubrir la baja de Hervelle, añadir una amenaza ofensiva en el poste bajo, y lo seguirá siendo mientras otros compañeros no alcancen su mejor condición física. El buen comienzo ha alejado las urgencias deportivas del Bilbao Basket, pero no es cuestión de ceder al rival aún más ventaja que la que supone la ausencia de dos piezas fundamentales.