bilbao. El Bizkaia Bilbao Basket es el vigente subcampeón de la Liga Endesa y eso le convierte en uno de los equipos a batir. Fotis Katsikaris tiene una enorme confianza en un equipo que se reforzado "muy bien" con lo que necesitaba. El técnico griego piensa que los hombres de negro "pueden jugar un muy buen baloncesto durante más tiempo".

Mañana empieza la temporada de la Euroliga. El Bizkaia Bilbao Basket defiende el subcampeonato. ¿Cómo se siente?

Después de mucho tiempo de pretemporada, estamos con ganas de que empiece la temporada porque lo que queremos es jugar partidos de verdad. Personalmente, no estoy 100% satisfecho de la pretemporada por todos los problemas que hemos tenido y que han impedido que podamos contar con todos los jugadores. Entonces, vamos a tener que hacer nuestra pretemporada en el inicio de la temporada. Tenemos que estar preparados para que el equipo se desarrolle, se ruede a la espera de que vuelvan todos los lesionados para hacer equipo. No vamos a estar al 100% no solo por los problemas que hemos tenido, sino por la planificación. Estaremos preparados para ganar los partidos, pero al tope llegaremos en noviembre y diciembre cuando tendremos un calendario muy complejo.

¿Pudo entonces sacar alguna conclusión de la Supercopa?

Sí, claro. Los jugadores y yo mismo. Era muy pronto para afrontar un torneo tan importante y de tanto prestigio. Habíamos jugado pocos amistosos, pero nos sirvió para ver lo que no debemos hacer. El Caja Laboral salió muy fuerte y a nosotros nos costó encontrar el ritmo. El equipo tuvo una gran reacción, parece que igual que la pasada temporada vamos a ser el mejor equipo de la Liga jugando por debajo en el marcador, ja, ja. Cuando tengamos el equipo entero tendremos más referencias y lo haremos mejor.

¿Notaron que el público sigue con el equipo?

Seguro. No solo por el apoyo que nos dieron, sino por su respuesta en la final. Eso quiere decir que en Bilbao gusta el baloncesto. Todo el mundo estaba sorprendido de que el pabellón estuviera lleno los dos días. Me alegro porque nuestra afición tiene mérito. Si van a estar con nosotros, les vamos a devolver todo el apoyo.

¿Ha pasado el Bizkaia Bilbao Basket a ser un equipo con sus miras puestas a partir de febrero?

No exactamente, pero es algo que viene dado por los objetivos que te marcas. Repetir lo del año pasado es muy difícil, no imposible. Jugaremos la Euroliga, pero sabemos que para repetir tenemos que ganar la Liga o jugar la final otra vez o que cambien los criterios de admisión. Hace dos años nos pusimos el objetivo de llegar a la Euroliga y lo hemos logrado antes de tiempo. Ahora bien, lo importante está en la Liga. Hay que ir partido a partido, que los jugadores estén mentalmente preparados para afrontar al siguiente rival, confiando en nosotros mismos y mirando cuáles con nuestras virtudes y nuestros defectos. Sumando victorias y experiencia, aprendiendo de las derrotas, estaremos mejor preparados para los momentos críticos. La temporada va a ser rara para todos, sobre todo para la afición y los medios. Podemos poner objetivos para la Euroliga, que es muy dura, aunque pensemos que somos el cuarto equipo del grupo. Intentaremos clasificarnos para el Top-16. Al mismo tiempo, tenemos que estar, debemos estar en la zona de play-off toda la Liga, entre los seis primeros. No podemos escondernos, debemos ser exigentes con nosotros mismos porque esta temporada no podemos dar pasos atrás. El objetivo es pasar el grupo de la Euroliga y estar en la mejor posición en la Liga a final de diciembre. Luego, podemos marcar otros objetivos si hemos pasado al Top-16 y más adelante llegará la Copa, en la que el equipo tendría que estar lo mejor posible. Ojalá acaben los problemas y lleguemos frescos entonces. Luego, al final de Liga habrá que dar lo máximo. Por eso he hecho el mismo planteamiento que el año pasado, pero con más partidos.

La semana pasada ya se oyó a algún jugador y a gente del entorno hablar de títulos. Pero en la ACB solo los ganan el Barça y el Caja Laboral.

Los títulos van a llegar si hacemos nuestro trabajo día a día, si somos inteligentes. A veces, tienen que coincidir muchas cosas. No somos un equipo para salir los primeros en la carrera, pero sí queremos mantener el nivel que tenemos y dar un paso más para meternos en el grupo de los grandes. Ya no somos un equipo supermodesto, ya no somos una sorpresa porque nos va a esperar todo el mundo con ganas.

Se puede decir entonces que el Bizkaia BB va a ser un equipo diesel.

Sí, puede ser. No quiero decir que el equipo va a perder partidos hasta coger su mejor forma, pero sí creo que este año nuestro máximo nivel puede ser más alto, que vamos a poder jugar un muy buen baloncesto durante más tiempo en los partidos. Ahora, al principio, la preocupación es el aspecto mental para buscar las claves que nos pueden dar victorias. Ganando partidos cogeremos la confianza para mejorar.

¿Qué tienen que aportar los tres fichajes al equipo que tan bien acabó la pasada temporada?

Pues tapar los agujeros que tuvimos. Llegamos a nuestro límite y no podía exigir más al equipo. Acabó la Liga y vimos que nos faltaba profundidad para aguantar una temporada muy larga. Algunos jugadores llegaron muy justos físicamente. Los tres tienen mucha calidad y mucha experiencia y en sus puestos, que son claves, van a ser jugadores importantes. Tenemos un base (Raúl López) que asegura dirección en estático, un pívot (D'Or Fischer) que puede intimidar y un jugador polivalente (Roger Grimau) que nos puede ayudar en las dos posiciones del perímetro en ataque y defensa.

Pronto decidió renovar a Fisher y Blums cuando quizás los aficionados esperaban otros jugadores en esos puestos. ¿Fue por su buen final de temporada?

Tenemos un presupuesto al que ajustarnos para hacer un buen equipo y no puedes cambiar los jugadores como si fuesen cromos. Valoramos el rol de Blums y el de Fisher en la cancha y fuera de ella. Los tres fichajes no son jugadores baratos y había que poner todo en la balanza. A Blums le conocemos muy bien e hizo un enorme esfuerzo en el último mes y medio de la temporada. Con Fisher quería un jugador que puede jugar de uno y de dos y, además, es un gran profesional y muy positivo. Por eso les hemos renovado. No podíamos hacer otro esfuerzo económico y, además, ellos querían quedarse.

¿Entiende que la gente eche en falta gente joven?

Con Fisher tenemos un buen comodín, es cupo y, además, conoce perfectamente al equipo. No va a quejarse si no juega y puede sustituir perfectamente a Raúl. Si tuviéramos ahí a un joven, tendríamos problemas por las competiciones en las que estamos. Otra cosa es que hubiéramos jugado la Eurocup. Hemos buscado una plantilla que se puede aguantar física y psicológicamente en las dos competiciones. Hemos visto a equipos de la Liga Endesa a los que les cuesta mucho este doble esfuerzo. Y nosotros es algo que vamos a vivir por primera vez. Por eso quería armar el equipo con más dureza y oficio. No es porque no me gusten los jóvenes ya que he trabajado más con ellos que con veteranos. Para un entrenador la alegría es poder desarrollar a un jugador. Pero esta temporada no tocaba.

Sus palabras son valientes y ambiciosas ya que cualquier entrenador encararía esta temporada con más prudencia. Quiere decir que la confianza en su equipo es máxima.

Estoy seguro de que va a responder. Es un muy buen equipo. A lo mejor le costará coger el ritmo, pero tiene la confianza del año pasado y no baja los brazos. Eso quiere decir que el equipo tiene algo, además del talento, que es más que el año pasado. Vamos a dar la cara a todo el mundo porque está en nuestros genes. Eso es muy importante para ser competitivos.