En verano, un puñado de semanas después de conquistar la Copa y con vistas a ampliar la plantilla para afrontar hasta cuatro competiciones distintas en una sola temporada –liga, Copa, Europa League y Supercopa–, la dirección deportiva del Athletic puso sus miras en la figura de Aimar Oroz (Aratzuri, 27-XI-2001). Un futbolista de gran clase, fino en su juego y que donde mejor se desenvuelve es en la media punta, claro que también puede actuar unos metros más atrás o en banda izquierda, posición en la que se proclamó el pasado mes de agostó campeón Olímpico en París jugando con la selección española. Futbolista del agrado de los técnicos del Athletic, el club, con Mikel González, su director de fútbol, trató, sin éxito, de ficharle. Este sábado, en el derbi entre rojillos y rojiblancos en El Sadar, Oroz se reencontrará con el Athletic.
El conjunto bilbaino tocó la puerta de Osasuna en el mes de junio con una oferta de nueve millones de euros fijos y otro más en variables. Se unió así a la puja por el futbolista, ya que también el Girona, que llegó a presentar hasta dos propuestas distintas al club navarro, estaba interesado en hacerse con sus servicios. Hubo quien entendió que más pronto que tarde se cerraría alguna de esas dos operaciones, toda vez que Osasuna necesitaba cuadrar sus cuentas, pero la venta de David García al Al-Rayyan, cerrada oficialmente el 1 de agosto, permitió a los navarros ajustar los números y centrarse en renovar a Aimar Oroz.
La noticia del interés del Athletic en hacerse con los servicios del media punta fue adelantada por el Diario Noticias de Navarra, periódico del Grupo Noticias, y confirmada por DEIA. Luis Sabalza, presidente de Osasuna, aseguró en una conversación con el periódico navarro que el club que dirige rechazó la propuesta del conjunto rojiblanco y del catalán. “Hay dos equipos que nos han trasladado sus ofertas, hemos dicho que no y ya está. Es algo que pasa casi todos los veranos de una forma y otra y no le doy más importancia”, relató Sabalza, quien aseguró que el objetivo era ampliar la vinculación con el futbolista.
El club rojillo se hizo fuerte en su posición de no vender. Sabía de manera interna que la salida de David García era un posibilidad muy real, aunque tardó en concretarse seguramente más de lo previsto, y es por ello que se remitió a la cláusula de Oroz, que era de 28 millones de euros, cuando el Athletic tocó a su puerta. Una cantidad que los responsables rojiblancos no estaban dispuestos a abonar.
El objetivo de la dirección deportiva era claro: reforzar una parcela en la que además de Oihan Sancet no hay otro futbolista específico, si bien Valverde ha encontrado alternativas para dicha demarcación en las figuras de Alex Berenguer o Unai Gómez, y aumentar la competencia interna para el navarro. Claro que no ha hecho falta la llegada de nadie de fuera para que Sancet esté ofreciendo un rendimiento excelente, como así lo corroboran los ocho goles y dos asistencias que ha firmado hasta la fecha, así como su relevancia en el juego colectivo del Athletic.
Un gol
Los números de Aimar Oroz no se acercan, ni de lejos, a los de Sancet, pero su importancia en Osasuna es total y se ha ganado el cariño del público. Hasta la fecha ha anotado únicamente un gol y es por ello que se le pide más, pero jornada tras jornada, y lo será también en el derbi de este sábado en El Sadar, el media punta navarro es indiscutible en las alineaciones de Vicente Moreno. Ha sido titular en los 17 encuentros de liga que ha disputado Osasuna y su participación se eleva a un total de 1.391 minutos, que se traduce en un 91% del total de los disputados. En Copa, además, suma un partido más, aunque fue suplente en el apretado triunfo ante el Ceuta.
Renovado el 1 de septiembre hasta el 30 de junio de 2029, Aimar Oroz firmó en su contrato una cláusula de rescisión de 30 millones de euros que habrá que ver si en un futuro es la cuantía a la que se remite Osasuna o, si por el contrario, acepta reducirla. Por lo pronto, este sábado se reencontrará con el Athletic en un derbi en el que muchas de las miradas estarán puestas en él.
