Nico Williams y Lamine Yamal están de moda, pero tratan de vivir ajenos a la atención que acaparan. “La gente está pendiente de nosotros pero nuestra fortaleza es el equipo, no solo lo individual”, ha señalado el jugador del Athletic durante la concentración con la selección española, tratando de sacudirse protagonismo, de aliviar la presión que se puede ejercer sobre jugadores que están dando sus primeros pasos en el profesionalismo.
“Lo bueno de la Eurocopa es que acabas un partido y a los cuatro días tienes otro, sólo piensas en fútbol. Y, al final, tenemos capitanes que no te dejan venirte arriba porque te ponen recto”, ha añadido Yamal, que se ha lanzado a explicar la anécdota del juego de piedra, papel o tijera que ambos llevaron a cabo tras el partido de octavos de final contra Georgia y que ha dado la vuelta al mundo. “Faltaba poco de la botella que tenía yo en la mano y le estaba contando algo, me cogió la botella y le dije ‘¿qué haces?’. Nos lo jugamos a piedra, papel o tijera, ganó, y el iluminado bebió y escupió el agua”, ha bromeado el futbolista del Barcelona.
Nico ha ahondado en la explicación asegurando que el juego es una práctica rutinaria, fruto del buen rollo. “Para el postre me da pereza levantarme a por el zumo de naranja y lo echamos a suertes”, ha dicho el menor de los Williams, que es visto como “un buen chaval, acogedor desde el primer día y una persona humilde que te ayuda siempre que puede, es cariñoso” por un Yamal que se fija en los demás para seguir progresando.
Ambos comparten cosas de la juventud, como el citado juego o bailes en las celebraciones, como también se pudo ver en el encuentro con Georgia, en el que ambos ejecutaron una coreografía. “Nos salió natural. Lo hablamos en el autobús antes del partido, hicimos un baile que espero que le haya gustado a la gente”, ha explicado Nico, que ha proseguido: “Cuando nos salen cosas en TikTok, no solo bailes, cosas de fútbol, nos lo enviamos, decimos que está guapo y lo hacemos”. Tienen 16 y 21 años.
Ambos representan la juventud en la selección española, pero también la sonrisa, el desparpajo, la velocidad, el desborde y el talento para ofrecer dinamismo a un grupo al que ya muchos sitúan como favorito para alzar el trofeo en Berlín. “Son dos jugadores que están dando un nivel muy alto, marcando diferencias a nuestro favor. Ojalá que sigan así. Son dos futbolistas distintos, de los que cada vez hay menos. Son muy jóvenes, tienen mucho descaro y no les importa el rival que tengan enfrente que van a jugar de la misma manera. Eso es positivo para conseguir resultados”, ha comentado por su parte Mikel Oyarzabal sobre un Nico Williams y un Lamine Yamal que están causando una gran sensación y que esperan seguir haciéndolo este viernes, en los cuartos de final de la Eurocopa contra una Alemania que confía en poder hacer valer su condición de anfitriona.