La demarcación de delantero aparece una temporada más como una ecuación sin resolver en el Athletic. La escasa pericia que muestra el equipo de cara al gol figura como la principal problemática en relación al funcionamiento del equipo, por lo que tiene de freno para sus aspiraciones. Aunque sea una carencia que implica al conjunto de la plantilla, resulta inevitable que la lupa enfoque a los jugadores que ejercen de ariete. Todo aquello que esté conectado a la identidad y el rendimiento de las diferentes alternativas al puesto se convierte en material de debate, análisis, polémica. Y a estas alturas del calendario, también de especulación.

Raúl García, con el balón en una sesión. | FOTO: BORJA GUERRERO

Con un único partido oficial disputado, no hay forma de desentrañar las dudas. Lo indiscutible sería que la nómina de hombres que pueden ocupar la posición más alta en el dibujo táctico es muy amplia, superior incluso a la de hace doce meses. Entonces, Ernesto Valverde contaba con cuatro posibilidades, ahora son cinco con la captación de Javier Martón. Pese a que no esté claro si este futbolista de 24 años que militaba en el filial de la Real Sociedad y llegó libre a Bilbao tendrá finalmente hueco en los planes del técnico, el pasado sábado figuró en la convocatoria elaborada para recibir al Real Madrid.

Gorka Guruzeta realiza carrera continua. | FOTO: BORJA GUERRERO

A última hora, el club tomó la decisión de darle dorsal, el 24, pese a que no lo hizo cuando se anunciaron los del resto de la plantilla, omisión que se interpretó como la antesala de una salida como cedido. Lo cierto es que Martón ocupó plaza en el banquillo al lado de Raúl García, Asier Villalibre y Gorka Guruzeta. En el once que saltó al terreno, el rol de delantero le fue adjudicado a Iñaki Williams. Se confirmaba así la opción más barajada, la lógica atendiendo al reparto previsto de las demás posiciones.

Martón, en Lezama. | FOTO: BORJA GUERRERO

Luego, en el descanso, entró al campo Guruzeta. Con él se incorporaron Sancet y Berenguer, siendo los sustituidos Nico Williams, Unai Gómez y Muniain. El mayor de los Williams se mantuvo sobre el césped. No hubo más modificaciones en el ataque. En un partido donde el marcador señalaba un 0-2 desde el minuto 36, Valverde solo recurrió a uno de los candidatos a ejercer de punta, los otros tres asistieron a la derrota desde la banda.

Comentar que Guruzeta, por sus características, es junto a Williams el ariete menos específico de los cinco, por sus movimientos no cabe catalogarlo como hombre de área, perfil que sí que encaja con Villalibre y Martón, así como con Raúl García, quien poco a poco ha ido adelantado su zona de influencia. A lo largo de la campaña anterior, el veterano fue un recurso habitual que empleó el entrenador para buscar el gol en los tramos finales de los partidos.

La situación contractual de los futbolistas mencionados no es un dato que arroje luz en torno a lo que vaya a suceder. Huelga decir que la renovación de Raúl García, con 37 años recién cumplidos, es una petición expresa de Valverde. Si bien en la 2023-24 tomó parte en numerosos compromisos (42), contó con muy pocos minutos (1.297) y logró tres goles. Sería extraño que en adelante su protagonismo creciese.

Guruzeta fue recuperado tras un par de cesiones gracias a los 13 goles que aportó al Amorebieta y ha cubierto el primero de los dos años por los que firmó, con 37 apariciones, 1.652 minutos y 6 goles. Villalibre, por su parte, marchó cedido al Alavés en invierno, tras comprobar que no contaba en absoluto para Valverde (194 minutos repartidos en 8 partidos). Su vínculo, rubricado por la actual directiva, expira en 2025. Le costó brillar en Mendizorrotza, de donde se despidió desempeñando un papel estelar culminado con el gol que valió el ascenso, el sexto de su cuenta.

SIN PISTAS

El desarrollo de la pretemporada no puede tomarse como un anticipo de lo que vaya a deparar la competición. Quizás dentro de un par de meses sea posible extraer conclusiones, pero sirva como muestra que Villalibre anotó cinco goles en los amistosos estivales de hace un año y a la hora de la verdad estuvo desaparecido. La observación viene al pelo para describir los vaivenes que han salpicado la situación de Martón.

A su llegada, Valverde declaró que ya había suficientes delanteros y que además su forma de jugar se parecía mucho a la de Villalibre. Vamos, que dejó sentado que no le necesitaba para nada. Luego, a raíz de los goles que materializó en los ensayos, tres, cambió de discurso y dejó abierta la puerta a que permaneciese en el grupo. Más tarde deslizó que ni sí, ni no, dado que el mercado está abierto.

En fin, un interrogante revolotea sobre la cabeza de Martón. Pero tres cuartos de lo mismo sería aplicable a Villalibre, por más que el entrenador asegurase que volvía de su cesión al conjunto gasteiztarra para ser uno más en el vestuario: “La idea es que se quede con nosotros”. Dio la sensación en los amistosos que partía con ventaja sobre Raúl García y Guruzeta, pero aún está por comprobar lo que ocurre en las citas oficiales.

De cualquier modo, Iñaki Williams sigue siendo el favorito, igual que el curso previo: alternó con la banda derecha, pero fue el ariete de inicio en veinte ocasiones.