Unai Simón (Murgia, 25 años) cumple su quinta temporada en la élite y goza del reconocimiento general. Repasa su trayectoria personal y la actualidad en una de sus contadas apariciones públicas, con ese talante sereno que transmite vestido de corto.
No tiene la costumbre de conceder entrevistas.
No me gustan. No me gusta el mundo del periodismo. Con todos los respetos, pero no me va demasiado.
¿Se puede saber la razón?
Por cómo funciona ese mundo. A veces se tiende a descontextualizar cosas que se dicen por buscar un titular, cuando resulta que el jugador no ha dicho exactamente eso. Y como ya he tenido alguna mala experiencia, trato de exponerme lo menos posible.
Vale. ¿Qué opina del sorteo de cuartos en la Copa?
Lo que quieres es que tu nombre salga primero para poder jugar en San Mamés, siempre es mejor en eliminatorias a un partido. Ha tocado el Valencia fuera y enseguida te viene a la cabeza que el año pasado caímos allí y nos quedamos fuera de la final.
Podía haber sido peor.
Nunca sabes. A estas alturas todos somos de Primera y el tema del campo influye más si cabe. Es un factor muy importante. Veremos.
Acaban de superar la ronda previa en casa, un triunfo que hacía falta.
Sí. La dinámica que traíamos en liga no estaba siendo la mejor. Veníamos de sumar dos puntos de 9 y había que sacar adelante el duelo contra el Espanyol, no solo por el significado que tenía en la Copa sino para recuperar confianza ante la visita del Madrid.
Hablaba de los últimos resultados ligueros. El entrenador y algún compañero suyo han reiterado que el equipo se encuentra bien, con buenas sensaciones. En la calle no faltan voces discrepantes.
Entiendo que la gente piense que no andamos bien porque sobre todo se guía por los resultados y no han ido como queríamos, ni los empates con Betis y Osasuna y menos lo de Anoeta. De repente bajas a la octava posición, estás fuera de Europa, pero la realidad es que nosotros vivimos el día a día y creo que contra Betis y Osasuna merecimos la victoria. A la Real le jugamos de tú a tú hasta el penalti, que te hace perder. Y contra el Espanyol pienso que la diferencia debió ser mayor. Así es como lo vemos dentro, en el vestuario. Otra cosa sería que empates y te hayan dominado o hayas tenido problemas serios, pero en general superamos a estos rivales y por eso decimos eso..
Lo que pesa a favor San Mamés no se discute, ahí están los resultados.
Fue injusto perder en liga con el Espanyol, que tuvo una y la metió. Contra el Mallorca fue acoso y derribo, igual que contra Osasuna. Puede que caer con el Atlético de Madrid fuese justo, también lo hubiera sido empatar. Repito que por sensaciones hemos merecido más puntos. No recuerdo un partido en que hayamos puntuado más de lo que merecíamos. Es verdad que nos está costando acabar, pero llegamos bien a la zona de tres cuartos y en cuanto afinemos los resultados caerán de nuestro lado.
¿Ha visto al Madrid contra el Barcelona y el Villarreal?
Sí, los dos partidos. Soy futbolero.
Y es parte de su trabajo estar informado, pendiente de los rivales.
Ya. Encima eran partidos atractivos, una final, en la que el Barcelona estuvo acertado, y el otro a cara de perro. El Athletic tiene una personalidad que puede ser parecida a la del Villarreal, en el sentido de salir a dominar, cada uno con su estilo, y podría ser que ante el Madrid se vea algo parecido a lo de la primera parte, que tengamos la iniciativa y cojamos ventaja. Eso sí, sabiendo que el Madrid suele reaccionar si va perdiendo.
Es lo que pasó en La Cerámica.
El Madrid es peligroso a la contra. Está cómodo replegado y si roba te hace daño, por eso será importante que acabemos las jugadas.
No da señales de fiabilidad este Madrid.
Contra el Barcelona estuvo peor y el Villarreal bajó en la segunda parte. Al Madrid hay que apretarle todo el rato. No creo que esté en un mal momento y aunque así fuera, siempre está vivo en el partido, tiene recursos para hacerte ocasiones de la nada.
“Mi trabajo no es solo parar, el portero participa en muchas cosas menos llamativas que pasan en un partido, tienes que estar siempre coordinado con la defensa”
En muchas de sus actuaciones no se le suele acumular mucho trabajo, interviene más bien poco, pero cada vez que le toca se trata de acciones muy comprometidas.
Mi trabajo no es solo parar, el portero participa en muchas cosas menos llamativas que pasan en un partido. El aficionado no está tan familiarizado con determinados conceptos del fútbol. Tienes que estar siempre coordinado con la defensa, también en las fases en que tu equipo ataca. Luego, a lo mejor haces una salida por arriba, evitas un problema y eso no cuenta como una parada.
Bien, pero las pocas oportunidades en que los rivales llegan a su área entrañan peligro.
Es verdad que el Athletic funciona muy bien defensivamente como bloque e individualmente se implican todos, desde los delanteros, de ahí que las aportaciones del portero sean decisivas, acciones de uno contra uno y así. Si ves a otros porteros, el del Elche o el Cádiz, por ejemplo, paran muchísimo, están interviniendo todo el partido, pero las paradas importantes que hacen son dos o tres. Y mira, la salida de portería que hice al final con Osasuna no se ve como una parada.
Es una parada.
Como decía, en el Athletic se minimiza lo que se considera como parada porque defendemos muy bien. Lo que no falta nunca es el comentario ese de que te tiran una y te la meten, que es algo que me fastidia.
Se les juzga con un rasero diferente a los jugadores de campo. De hecho, en su ficha de la página web del club aparece el número de goles recibidos, no el de los que ha impedido. A los demás les ponen los goles marcados, no los errados.
Siempre va a ser así con los porteros, siempre se nos analiza más por los que nos meten que por los que evitamos. Pero yo no voy a cambiar el fútbol, asumo cómo está montado.
“Tuve mucha suerte, se alinearon los astros; en dos semanas pasé del ser el cuarto portero del equipo a debutar en San Mamés, pero luego tienes que demostrar”
Otra cuestión. Su trayectoria profesional reluce, es muy joven aún y está muy bien considerado, pero no negará que ha tenido suerte en…
Mucha suerte.
Está bien que lo diga tan tranquilo. Iba a referirme a sus inicios, claro.
Se alinearon los astros. En dos semanas pasé de ser el cuarto portero a debutar en San Mamés. Se fue Kepa al Chelsea, Iago se lesionó y Álex Remiro andaba a vueltas con la renovación. A menudo el debut en Primera es una cuestión de suerte, que si hay un lesionado o alguien se retira, circunstancias que influyen, pero luego tienes que demostrar que tienes capacidad y yo creo que lo hice.
En aquellos primeros partidos transmitió un temple impropio en un novato.
No es que no supiera lo que había en juego el día del debut. Salí al campo muy nervioso, inseguro. Ni siquiera había jugado en Segunda y si salí tenso fue porque no me veía con nivel para estar en Primera, pero me duró cinco minutos. Nada más empezar vino un balón aéreo al que no salí y entonces Yuri me gritó. En ese instante me olvidé de todo lo que me rondaba por la cabeza y me centré en el partido. Pero no dejaba de ser un portero de Segunda B y en Primera todo va mucho más rápido. Cuando terminó el partido me dije: ‘Hostia, a ver si voy a poder jugar en Primera’. Al de unas semanas entró Iago, pero aquel año me vino muy bien para ver la categoría desde dentro y mejorar algunas carencias físicas. El año siguiente jugué la primera jornada contra el Barcelona y desde entonces he tenido continuidad.
Otra historia curiosa es la de su internacionalidad absoluta. Estuvo en categorías inferiores con España, pero adelantó a dos porteros consolidados en la Premier, Kepa Arrizabalaga y De Gea. Y eso coincidió con una racha un tanto discreta, por decirlo así, en el Athletic.
A ver, debuté con Berizzo y luego, ya con Gaizka Garitano, tuve un año muy bueno y en agosto me convocó Luis Enrique para un par de amistosos. No sé si, como dices, no andaba bien, pero igual sería porque se me puso el listón muy alto por lo hecho en la temporada anterior.
Puede ser, pero cuando debutó con España en partido de competición, creo que no atravesaba su momento más feliz.
Luis Enrique me dio la oportunidad en un amistoso y tomó la decisión de contar conmigo contra Suiza, que ya era partido oficial. Y seguí jugando.
No partía ni como primera ni como segunda opción, sin embargo…
Yo no me considero mejor portero que De Gea o Kepa, al final todo depende del seleccionador. Ahora le han nombrado a Luis de la Fuente y puede pasar que opine de otra forma y no vuelva a ir convocado. Si en 2020 hacen apuestas sobre quién va a jugar el Mundial de Catar, pocos hubiesen dicho que sería yo. Parece que a Luis Enrique le gusto. No creo que yo hiciese nada fuera de lo normal.
Goza del privilegio de jugar en el ámbito internacional, algo que en el Athletic se le niega.
Este es mi quinto año en el equipo y en los cuatro anteriores nos hemos quedado a las puertas. Vas viendo cómo se van yendo jugadores que han competido en la Europa League y en la Champions; los que aún están en la plantilla nos transmiten la importancia de estar ahí, en lo individual y como equipo, de que el Athletic esté presente en Europa. No hemos estado lejos. Las sensaciones de este año son positivas y creo que estamos en el camino correcto, pero es evidente que hay más candidatos.
“Ganar a los rivales de abajo es clave, el calendario nos favoreció, pero otros años en estos partidos podíamos salir empanados y esta vez no ha sido así”
Uno menos, el Sevilla.
Sí y uno más, Osasuna. Ahora mismo hay nueve equipos para estar en Europa, también hay que contar al Rayo. En puntuación están con nosotros. Ganar a los rivales de la parte baja es clave y luego acertar con los rivales directos.
Ganar a los menos fuertes, lo hicieron el comienzo, el calendario vino como vino y respondieron.
Sí, el calendario nos favorecía, pero otros años a esta clase de partidos podíamos salir empanados y esta vez no ha sido así.
Estamos en el mes más cargado.
Hay que saber disociar las competiciones por mucho que el objetivo sea el mismo en todas. Nos quedan tres partidos para jugar una final y si tengo que elegir me quedo con ganar en Copa, es algo que nos ilusiona. Pero no podemos dejar de lado lo otro porque el club necesita ir a Europa.
Firmó la última renovación hasta 2025, sin cláusula. Puede explicar lo segundo.
Si tienes cláusula se interpreta que nadie va a pagarla, no la quise poner por respeto al club. Así, si llega un día en que tienes que salir, las dos partes nos tenemos que poner de acuerdo. Espero que no pase nunca. Poner cláusula es como tasar al jugador, pero el club pierde influencia porque si viene otro equipo y pone el dinero…
O sea, que no quiere irse.
Lo tengo clarísimo. Si ocurriese sería o porque el club está necesitado de dinero y me pide que salga o porque hay otro portero mejor y juega, en cuyo caso yo pediría salir. Mientras el club me transmita que soy el idóneo, seré feliz aquí.
“Julen Agirrezabala no me lo pone fácil, genera una competencia dura, no se dar por vencido y eso me obliga a tener las orejas tiesas, a dar lo mejor de mí”
No parece que Julen Agirrezabala sea malo precisamente.
Es muy bueno. Me veo un poco reflejado en él, por la edad que tiene, las ganas. Sabes que va a responder. No me lo pone fácil, genera una competencia dura, no se dar por vencido y eso obliga más a tener las orejas tiesas. Tengo que dar lo mejor de mí. Quitar el puesto, así dicho, suena feo, pero de eso va. Julen es un chaval de la hostia, muy buen tío.
Como a usted al principio, le dan los partidos de Copa.
Valverde le pone porque sabe que está capacitado. Es de garantía. Ir a jugar a Alzira, Sestao o Elda puede que no tenga reconocimiento, pero no es un chollo, son partidos complicados y ha tenido intervenciones que le han evitado sustos al equipo.
