El Bilbao Athletic endereza el rumbo

El Bilbao Athletic se presentó en Las Gaunas con propósito de enmienda y recondujo su tropiezo, en Lezama de la primera jornada, ante la UD Logroñés que sufrió ante su público, superada en la primera parte, y tras el descanso empujó inútilmente ante un rival sólido y ordenado que sumó sus tres primeros puntos en Las Gaunas. Bingen Arostegi presentó caras nuevas en su once inicial. Con lo que el técnico rojiblanco buscaba la reacción en su equipo, sobre todo, en la defensa y en la línea de ataque. Chasco, Eguíluz y Cabo reemplazaron a Oier López, Sillero y Ewan. Jon Cabo fue la referencia o el falso nueve. El técnico de Bermeo quería dejar atrás la bisoñez y los errores del primer encuentro. Y lo consiguió. Dio otra imagen. Por los de casa, los exrojiblancos Serantes y Markel Lozano salieron de inicio y con Kortazar en el banquillo, que tuvo sus minutos en la segunda parte.

Naveira fue el primero en intentarlo desde lejos con un disparo sin consecuencias. Serantes evitó el tanto de Cabo con un disparo abajo tras jugada de Luis Bilbao y, en la misma jugada, Goti no pudo empalmar el balón en una acción acrobática. Ya se dejaba ver la intención visitante. Los cachorros tenían controlado el empuje riojano y Padilla no pasaba apuros bajo palos. En un robo visitante en la salida de balón, Cabo finalizó con una vaselina que no encontró puerta por muy poco. El marcador seguía sin moverse a la media hora y eso que los bilbainos habían merecido algún premio con sus peligrosos acercamientos. Luis Bilbao no pudo por dos veces, en la misma jugada, superar al guardameta local. El gol rondaba la meta riojana y por fin llegó. Gerenabarrena se inventó un precioso pase largo al espacio y Jon Cabo con una finalización rasa cruzada abrió el marcador. El Bilbao Athletic ya tenía en su poder el merecido premio al trabajo de toda la primera mitad. El Logroñés solo se acercó justo antes del descanso con un remate desviado de Vinicius.

En la segunda parte, los bilbainos esperaron a su rival estirados en su terreno de juego y a la UD le costaba encontrar su sitio. Padilla tuvo que jugársela a los pies de Vinicius. Un nuevo remate del brasileño lo tocó lo suficiente el portero rojiblanco para que el esférico acabara en el palo. Fue la ocasión más peligrosa de los de casa que ya empezaban a generar ocasiones. Aunque los cachorros mantuvieron la compostura no sin pasar apuros. Una nueva llegada acabó con un remate de Clau Mendes que repelió el palo bien defendido por Naveira. De nuevo Mendes se topó con Padilla y el Schutte estuvo a punto de marcar pero Mendibe sacó el balón bajo palos. Ahora sí presionaban los riojanos de verdad. A punto de decidir estuvo Malcom en una contra pero Kortazar pudo con el desafío. Padilla volvió a interponerse al remate de Dani Pichín y los primeros tres puntos viajaron a Bilbao.