A once días de la final de Copa ante la Real Sociedad de lo que no hay duda es de que Iñaki Williams será la referencia ofensiva del Athletic en el histórico derbi. El delantero bilbaino, que no pasa por su mejor momento realizador, no se arruga. Ante el Eibar, el pasado sábado, no vio puerta pese a disponer de varias ocasiones ante Dimitrovic. Pero confía en darle la vuelta a la situación en La Cartuja. Así lo ha asegurado el rojiblanco este martes en una entrevista en Onda Vasca, donde ha puesto en valor su otras facetas sobre el terreno de juego.

"Soy el nueve y tanto el equipo como los aficionados es normal que me exijan; yo también me voy frustrado a casa cuando no meto goles. Pero hago muchas cosas dentro del campo y he jugado 185 partidos seguidos con cinco entrenadores diferentes y todos han apostado por mí. Aunque es obvio que me gustaría meter más goles", ha señalado Williams, que esta temporada suma cinco tantos en LaLiga, uno en la Supercopa y otro en la Copa. En lo personal, el bilbaino dice estar "contento" con la "confianza" que le traslada el entrenador asturiano: "Habla mucho conmigo y me quiere hacer mejorar, como al resto de mis compañeros. Estamos en una dinámica muy buena, en el campo nos vemos muy cómodos y la idea de Marcelino.

Sobre la final del 3 de abril, Williams, que prevé un duelo de alto voltaje ante la Real, no ha escondido su emoción: "Llevamos mucho tiempo esperando el gran día y ya no queda nada. Esperando que caiga de nuestro lado. Es un derbi y no hay favoritos, somos dos equipos que tenemos muchísima historia, llevamos mucho tiempo sin ganar la Copa y lo vemos tangible. Va a ser un partido muy complicado y esperamos estar a la altura".

CON LA CABEZA FRÍA

Cuestionado sobre el encuentro que prevé ante el conjunto txuri-urdin, el nueve del Athletic, que lleva "todo el año pensando en este día", ha considerado fundamental entrar a la final sin nervios. Si es posible, claro. "Tenemos que estar tranquilos, intentar aislarnos y tener la cabeza fría. Tener el corazón tranquilo porque las emociones van a ser muy fuertes y hay que intentar controlarlas", ha subrayado Williams, que tiene claro a quién dedicará el título si el Athletic levanta la Copa: Mi madre va a ser la primera que me venga a la cabeza. Es una guerrera, gracias a ella y a mi padre, y a los valores que nos han trasladado, estamos aquí mi hermano y yo".