Roberto Ríos (Portugalete, 8 de octubre de 1971) es una persona cercana. Los que le conocen dicen de él que rebosa amabilidad por los cuatro costados. Es muy sencillo contactar con él. Cuando el Athletic, su Athletic como dice él, comparece en Sevilla y él está en la ciudad que le ha acogido no falla. Pero hay un pero. La pandemia del covid-19. "Es un fastidio y no sabes la rabia que da". Lo dice en una charla distendida en una terraza a escasos metros de la Puerta de Jerez, acceso directo a la zona más turística de la capital sevillana. "Es todo muy raro, al fútbol le falta alma". Le duele. Esta noche no puede estar en La Cartuja por culpa de la crisis sanitaria.

Quizá hoy pueda charlar unos minutos con Rafa Alkorta, director deportivo del Athletic y con el que coincidió cinco años en el conjunto rojiblanco entre 1997 y 2002 "Llegamos juntos, él que volvía del Madrid, y nos fuimos juntos". Hay un matiz: "Bueno por mí pagaron 2.000 millones de las antiguas pesetas (12 millones de euros). Siempre me dicen lo mismo, pero bueno€ Ahora le toca a Iñigo (Martínez) ese récord", lo suelta con una sonrisa de oreja a oreja. Roberto es así. Sinceridad de la cabeza a los pies. "Vamos, siempre lo digo, sé que quizá podía haber dado más con el Athletic. Ya sea por una cosa o por otra, no salieron las cosas como yo hubiera querido, aunque tampoco fue tan malo. Crecí mucho como futbolista, lo di todo, me impliqué, pero el fútbol es así, tiene sus leyes".

Roberto ha vuelto a Sevilla tras cerrar su etapa como segundo entrenador de Pepe Mel. Se toma su tiempo, aunque el Athletic es una de sus debilidades, claro está que junto al Betis, el equipo en el que empezó a jugar y al que llegó a entrenar como ayudante del entrenador de Las Palmas. ¿Va a ganar el Athletic? Lo piensa 43 segundos. "Es complicado decirlo. Tenemos la referencia de hace quince días. Quizá no valga, pero también nos dice que si al Barça le concedes la primera salida, te pude sentenciar. Al Madrid se le frenó esa primera salida, pero es un equipo diferente al Barça". Sí avanza una sensación. "Vamos a competir, eso lo tengo claro. Marcelino tiene su idea, igual nos viene bien, pero a ver si está Messi o no. Y si está, que no sea al 100%".

"Cuando estoy con mis amigos en Sevilla me defiendo. El Athletic es algo especial"

Exjugador del Athletic

"Marcelino tiene su idea, igual nos viene bien, pero a ver si está Messi o no. Y si está, que no sea al 100%"

El portugalujo prefiere matizarlo. "El Barça es muy dinámico. Está más acostumbrado a superar la presión que le hace el rival desde arriba. El Madrid, no tanto. Pero también debemos premiar nuestras armas", lo subraya porque ha mamado Athletic. "Mi aita (Eusebio Ríos) no llegó a jugar en el Athletic, sí en el Betis, pero estuvo en Lezama como coordinador". En su casa, su mujer e hija son del Betis. "las tengo casi convencidas de que sean también del Athletic". Lo dice entre risas. Su perrita, Greta

CANTERA DE LEZAMA

El exjugador del Athletic defiende la causa rojiblanca siempre que está en Sevilla. "En los últimos años he estado en Las Palmas y te desconectas. Pero cuando estoy con mis amigos en Sevilla me defiendo. El Athletic es algo especial. Estamos hablando de una filosofía única. Yo no me hice en Lezama, como tampoco Bittor (Alkiza), Andoni Imaz€ cuando estuve allí. Es algo que lo hemos comentado entre nosotros". Esta noche la pandemia le impide estar en La Cartuja, "un campo en que el he jugado y entrenado, y que es raro por su pista de atletismo", pero espera estar dentro de tres meses de la final de Copa ante la Real Sociedad. "La que se podría armar si pudieran venir 60.000 aficionados". Lo expresa con una sonrisa. Roberto Ríos es así. Abierto. Se despide. "En abril ganamos otra Copa".