Bilbao - El futuro de Beñat Etxebarria (Igorre, 19-II-1987) en el Athletic está escrito a corto plazo. En concreto, hasta el 30 de junio del próximo año, fecha en la que toca a su fin el contrato que vincula al centrocampista con el club bilbaino, donde el 7 rojiblanco se encuentra a las puertas de su séptima temporada como león. Víctima de una sobrecarga muscular en el arranque de la pretemporada, Beñat reconoció ayer en rueda de prensa sentirse ya “al cien por cien” y con el objetivo de ir acumulando “cargas de trabajo” a fin de iniciar en las mejores condiciones posibles un curso que podría resultar clave para su futuro. Al igual que Mikel San José, quien también finaliza contrato al término de este ejercicio, el de Igorre encara la campaña consciente de que deberá ofrecer un rendimiento óptimo sobre el césped para no perder protagonismo en el equipo y ceder ante la renovada competencia que se avecina en el centro del campo.

Las salidas del club de Ander Iturraspe y Mikel Rico han dejado vacantes dos plazas por las que pujarán con fuerza jugadores como Mikel Vesga, Unai López y el joven Oihan Sancet, una de las sensaciones de una pretemporada que está dejando buenas vibraciones en el plano colectivo a Beñat, dado que “colectivamente estamos haciendo lo que nos pide el míster en todo momento y en los partidos también estamos haciendo bien lo que trabajamos en los entrenamientos”. Lejos de esquivar su creciente responsabilidad dentro de la caseta, el de Igorre asume que tendrá que dar un paso al frente en cuestión de jerarquía, pues “aquí hay grandísimos jugadores y gente que tiene que coger galones poco a poco. Ahora nos tocará a algunos al haberse ido compañeros y amigos a los que personalmente echo de menos al haber estado casi toda una vida con ellos”.

Beñat, aun así, lanzó un guiño al vestuario al asegurar que “la gente está comprometida y con ganas de afrontar los retos que vienen este año”. “Tenemos una plantilla muy amplia, en todos los puestos hay mucha competencia y eso es bueno para el equipo y para uno mismo mejorar y apretar todos los días”, advirtió asimismo Beñat, titular en 25 de los 27 partidos de liga que disputó durante el pasado curso, en el que marcó un gol. De cara a la nueva temporada, el vizcaino está convencido de que la clave pasa por firmar un buen inicio de liga. “El equipo ha ido de menos a más en los amistosos y sabemos que hacerlo bien en estos partidos nos va a dar confianza para afrontar el primer partido de liga, porque la clave de este año es empezar bien la temporada”.

cautela Tanto es así que Beñat, cauto al igual que sus compañeros, no se atreve a marcar Europa como objetivo al entender que “esa palabra de Europa es mejor dejarla para más adelante. “Ya vimos el año pasado que no empezamos como queríamos y eso pesa mucho, porque luego sufres durante el año. Queremos empezar bien y después intentaremos terminar lo más arriba posible”, añadió el centrocampista rojiblanco, quien indicó que el plan a seguir no ha variado desde la llegada de Garitano.

“Gaizka nos puso las cosas claras desde que llegó y seguimos con ello, teniendo que pulir algunas cosas”, explicó en la matinal de ayer el propio Beñat, quien subrayó que “nos identificamos mucho con esa presión alta que quiere el míster, porque somos un equipo muy intenso. Estamos trabajando para que el equipo rival no se sienta cómodo y poder hacer daño a partir de esa presión”. La creación del juego, su punto fuerte, es una de las asignaturas pendientes de la pasada temporada y sabedor de ello se muestra también el de Igorre, quien señaló al respecto que “lo ideal sería presionar bien alto, jugar bien y marcar goles, pero estamos en pretemporada y lo que tenemos que hacer es acumular carga de trabajo, porque las piernas están un poco pesadas para hacer el juego que queremos, aunque todo llegará”.