Bilbao - La actuación arbitral de ayer en San Mamés causó una profunda indignación en la expedición del Levante, hasta el punto de que su presidente, Quico Catalán, decidió comparecer en zona mixta para declarar públicamente que lo sucedido sobre el terreno de juego fue “una auténtica vergüenza”. “Perdemos el respeto al fútbol actuando de esta forma, porque ha habido decisiones que ha visto toda España que son garrafales y yo que era un enamorado del VAR, ya no me lo creo después de este partido”, agregó Catalán, quien subrayó que “son tres jugadas que han marcado el partido con un penalti final que nadie se lo explica”. “Entras en el vestuario, ves a gente llorando y no puede ser, porque nos jugamos todos muchísimo y es inadmisible”, señaló además el presidente del Levante, quien recordó que “siempre me he portado mejor que bien con el colectivo arbitral, pero ya no, porque lo que ha ocurrido en este estadio ha sido una auténtica vergüenza y si me tienen que sancionar con 500 partidos, que me sancionen”.

PACO LÓPEZ, ENFADADO El entrenador del Levante, Paco López, también lamentó en rueda de prensa el “polémico” penalti señalado sobre Iker Muniain y el gol anulado en la primera mitad a Coke, al entender que “una vez más, si hay dudas, volvemos a salir perjudicados y ya está bien, porque esta vez he tenido que contar hasta diez, veinte y treinta”. - A. A.