bilbao - Juan Carlos Ercoreca asoma ya con los cinco sentidos puestos en la Fundación Athletic, la cual preside y analiza con DEIA.

¿Qué significa para usted presidir la Fundación Athletic?

-Para mí es muy importante. El Athletic es el eje de una comunidad inmensa y tiene que estar con la sociedad. Desde la junta directiva anterior se mandó algún mensaje de que la sociedad iba por un lado y el club por otro. Se puede decir eso, pero no echar la culpa a la sociedad, desde luego. Será problema del club, que deberá cambiar el paso y ponerse al lado de la sociedad. En ese sentido hemos perdido mucha penetración en la juventud, en los niños, en gente que tiene muchas dificultades para acudir al campo y en otras mil cosas. La Fundación ya está haciendo ahí cosas interesantes, pero para mi gusto son pocas y, además, tienen poca visibilidad. En ese aspecto adolecemos de medios tecnológicos para hacer una difusión exhaustiva de lo que se ha venido haciendo y de lo que se va a hacer. Hasta la propia web del club está dando bastantes problemas y ahí es donde tenemos expertos en la junta que están analizando todo eso para ponernos en el siglo XXI.

¿Qué le ha sorprendido de lo que ha podido observar en la Fundación?

-Que sean capaces de trabajar en las instalaciones que tienen, porque son muy agobiantes y pequeñas. Esta casa es complicada para trabajar, porque tiene unas condiciones arquitectónicas que no están pensadas para el trabajo, pero mi primer objetivo va a ser encontrar una ubicación en la que se pueda trabajar como se trabaja hoy en día. También me ha sorprendido que hay demasiados gastos asumidos por Fundación, en los que esta no tiene potestad como tal, como pueda ser Lezama y toda su parte formativa.

¿Qué proyectos tiene en mente?

-Todavía es pronto, pero tenemos una idea que ya comunicamos durante la campaña y que consiste en crear dos ocasiones en el año, a poder ser que coincidan con el principio y final de temporada, donde se visualice la Fundación con una fiesta, un encuentro o un evento deportivo que sirva también para recaudar fondos no solo para la propia Fundación, sino para clubes convenidos. Ese es otro apartado de gasto que tiene la Fundación, cuando la relación que se tiene con esos clubes es muy cortita. Hemos pensado además en acercarnos más a las peñas del Athletic que están fuera, además de las que están aquí, porque muchas veces se han sentido desatendidos y queremos hacer una labor de aproximación con ellos. La Fundación, en ese sentido, puede desarrollar herramientas de fidelización trabajando en ello, aunque para todo eso lo que procede ahora es que haya un cambio de patronato y quiero incorporar personas que estén más activas en la Fundación y que sean del ámbito de la cultura, de asociaciones o apoyo a inmigrantes y gente que está en riesgo de exclusión social, por ejemplo.

¿Habrá noticias próximamente?

-Estoy terminando un análisis de funciones de las personas que están trabajando y de perfiles, porque ahí hay un apartado que es la captación de recursos, el cual debiera ser mi ocupación principal y viene fundamentalmente por las empresas que participan. Ahí tenemos un trabajo impresionante por hacer y todo el mundo para explorar, porque nos hemos limitado hasta ahora a las empresas de siempre. También quiero que participen mucho más los veteranos del Athletic.

¿Contará con Ritxi Mendiguren, director de la Fundación hasta ahora?

-He hablado con todos hasta la fecha y les he dicho que no tengo una idea preconcebida. No tenían hasta ahora un organigrama y, aunque lo hubiera, el funcionamiento ha sido más comunitario. Ahora mismo, por tanto, mi dificultad es saber quién hacía qué y, sobre todo, si está capacitado para hacer eso o tiene más capacidad para desarrollar otra actividad. Tú has mencionado un nombre, pero no tengo ninguna idea preconcebida como digo ni con él, ni con ninguno de los demás. Habrá un director o directora y no sé si será de los que están ahora o habrá que incorporar a otra persona.