bilbao - El plan diseñado para intentar salir airoso de la siempre complicada visita al Ramón Sánchez Pizjuán, donde el Athletic solo ha conseguido imponerse al Sevilla en una de sus últimas veintiún comparecencias en el campeonato de liga, no pudo salir peor para lamento de José Ángel Ziganda, quien vio naufragar de nuevo su apuesta por un bloque de marcado carácter defensivo. San José, Iturraspe y Vesga, al igual que sucedió en Mestalla en la séptima jornada, formaron de inicio y volvieron a fracasar colectiva e individualmente hasta el punto de que el de Matiena y el gasteiztarra fueron sustituidos tras el tiempo de descanso, dado que “íbamos 2-0 y algo había que hacer”, según destacó tras el partido el técnico rojiblanco, que también retiró del terreno de juego a Córdoba para dar forma a un triple cambio después del paso por los vestuarios.

“Los tres cambios no era la idea que jugasen, al menos tan pronto, pero pensamos que si les hacíamos un gol rápido ellos se podían poner nerviosos y hemos arriesgado mucho para marcar en el segundo tiempo, pero al final, ni una cosa ni la otra”, lamentó Kuko, quien admitió instantes después que “ha sido un mal partido para nosotros y estamos descontentos”. En cuanto al motivo que le animó ayer a realizar numerosos cambios en la alineación, el de Larraintzar, que pensaba que “tocaba” acometer dicha revolución en el once pues “hay plantilla”, reconoció que su intención no era otra que “refrescar” el equipo. “Veníamos de una racha de partidos de jugar cada tres días y además de conllevar un riesgo evidente de lesión, las piernas no están igual y pensábamos que podíamos refrescar el centro del campo, teniendo en cuenta que en Valencia no lo hicieron mal pese al resultado final y que hay equipo, pero el Sevilla ha salido muy bien y nosotros nos hemos puesto demasiado fácil por detrás en el marcador”. “Después hemos querido, pero no hemos podido”, indicó el propio Ziganda.

El entrenador rojiblanco, que también confesó que la apuesta por el trivote en la medular “tampoco ha salido bien otras veces y tengo que apuntar”, hizo hincapié en que “somos conscientes del partido que hemos hecho” y no titubeó al advertir de que el encuentro de ayer ante el conjunto hispalense “era una oportunidad para todo el mundo y cuando las cosas salen bien todos estamos contentos, pero cuando no se aprovecha la oportunidad, cada uno analizará cómo son las cosas”. Ziganda quiso mandar así un mensaje al vestuario, donde hombres como San José o Vesga volvieron a quedar señalados por sus bajas prestaciones, aunque el técnico sacó la cara por ambos al apuntar que el primero “ha hecho buenos partidos últimamente y tiene un repunte”, mientras que “para Vesga no está siendo un año fácil”.

Tampoco lo está siendo en términos generales para el Athletic, que cayó derrotado a manos del Sevilla en un choque que ni mucho menos dejó buenas sensaciones a Ziganda. El técnico, no en vano, admitió que “me voy frustrado por todo, con el resultado y por cómo ha salido todo”. “Aun así no pierdo la esperanza para nada y sé cómo vamos a estar el jueves”, añadió en relación al envite frente al Olympique de Marsella Kuko, quien dijo estar seguro de que el equipo “va a estar de otra forma” en Francia.

no “tira” nada El de Larraintzar, además, remarcó que por su cabeza no pasa tirar la liga para centrar toda la atención en la Europa League: “No estoy para tirar nada en ningún partido, eso lo tengo claro. Somos muy conscientes de lo que significa cada partido y estamos dolidos porque sabemos lo que supone jugar cada encuentro con el Athletic”. “El jueves jugamos en la Europa League y también nos ilusiona. Nos ha costado mucho llegar hasta aquí, muchos esfuerzos y sacrificio, y la vamos a pelear como Dios manda”, agregó Ziganda, que se mostró convencido además de que la buena imagen ofrecida el miércoles ante el Valencia en San Mamés “no fue un espejismo, como tampoco lo fue la primera parte del encuentro contra el Málaga o el partido de Moscú. El equipo tiene más y vamos a dar más”.