bilbao - Tal como adelantó DEIA el pasado día 24, el Athletic pulsó el botón para llevar a cabo la renovación de Unai Núñez (Portugalete, 30 de enero de 1997), cuya ampliación de contrato se hizo efectiva finalmente hasta el 30 de junio de 2023 con una cláusula de rescisión de 30 millones de euros. El central portugalujo, que cumple su primera temporada como león tras promocionar en verano desde el Bilbao Athletic, pasa a tener el contrato más largo dentro del vestuario, en el que asoma como el segundo jugador más joven por detrás de Iñigo Córdoba, otra de las sensaciones rojiblancas en el primer tercio de una campaña en la que Núñez se ha reivindicado a la velocidad de la luz.

Titular en las diez jornadas de liga disputadas hasta la fecha, en las que suma todos los minutos de juego al igual que Aymeric Laporte, el vizcaino ha conseguido mantener e incluso acrecentar la confianza depositada en él por José Ángel Ziganda, que no ha dudado en darle galones en una defensa huérfana todavía de las prestaciones de Yeray Álvarez, otro central con futuro en el Athletic. Se trata, no en vano, de una parcela del campo que el club bien puede congratularse de tener blindada, habida cuenta de la juventud y de los contratos firmados por los tres jugadores citados. Laporte, con 23 años, cuenta con una cláusula que el próximo verano dejará de ser de 65 millones para alcanzar los 70 hasta 2020, mientras que Yeray, a sus 22 años, figurará hasta 2022 con los 30 millones de euros que marcan una cláusula de rescisión que emerge en el mismo punto que la de Núñez, quien ha firmado un año más de contrato con la entidad de Ibaigane.

Los tres, así pues, asoman como parte importante en el presente y futuro de un equipo que sigue renovándose paulatinamente y que espera la materialización de la renovación de Kepa Arrizabalaga, otro activo del club que se antoja sumamente relevante a corto, medio y largo plazo. A la espera de lo que depare su caso, ayer fue Núñez quien pudo saborear la escenificación de una ampliación contractual que está por ver si acometerá la junta directiva comandada por Urrutia con Xabi Etxeita. El zornotzarra, relegado de nuevo a un segundo plano, finaliza contrato al término de la presente temporada y su papel con Ziganda se ha limitado en los tres primeros meses de competición a los encuentros correspondientes a la Copa y la Europa League, pues aún no se ha estrenado en liga esta campaña. Si la temporada pasada fue Yeray quien le arrebató la condición de acompañante de Laporte en el eje de la zaga, este año ha sido Núñez quien le ha superado en la rotación con solventes actuaciones desde su debut frente al Getafe el pasado 20 de agosto.

una década en lezama La renovación del portugalujo, un central tan contundente en el juego aéreo y en el cuerpo a cuerpo, como rápido y eficaz al corte, se produce diez años después de su ingreso en Lezama. Su incorporación al alevín D del Athletic tuvo lugar cuando tenía 10 años de edad y desde entonces ha ido quemando etapas pasando por todas las categorías inferiores de un club que aplaude ahora su ampliación contractual, del mismo modo que la celebra el propio jugador. “Estoy muy contento, es un sueño hecho realidad”, aseguró el de Portugalete en declaraciones ofrecidas a la web oficial del Athletic, en las que Núñez quiso subrayar su alegría por poder “pertenecer durante seis años más a este club”, un largo periodo de tiempo en el que “seguiré intentando mejorar y hacerlo lo mejor posible”.

Su amplio margen de mejora, pese al notable rendimiento ofrecido ya en sus primeros meses en la élite, es otra de las razones que avalan una renovación que el vizcaino también hizo valer a la hora de mandar un guiño a todos los jugadores que pertenecen a la cantera rojiblanca. “Al principio de temporada, cuando empiezas, nadie espera algo así, pero con trabajo y sacrificio las cosas llegan y esto sirve para que todos los chavales de la cantera, como yo me considero, sigan trabajando para cumplir su sueño”, señaló Núñez, que completó el pasado sábado contra el Barça uno de sus mejores partidos con el primer equipo. Lo hizo sin acusar en ningún momento los posibles nervios derivados de su primer vis a vis con el conjunto azulgrana, con la calma y contundencia de un veterano, imponiéndose en su particular duelo con Luis Suárez.

Tanto es así que el delantero uruguayo volvió a rayar por debajo de su nivel, lo que pone de manifiesto el buen hacer de un joven pero expeditivo central que aspira a hacer carrera en el Athletic. A día de hoy, solo el gol se resiste a Núñez, que ha visto incluso cómo se convertía en internacional sub’21 gracias a su buen hacer como león. Sus últimas convocatorias, del mismo modo que sucedió el año pasado con el también debutante Yeray, no han hecho sino reflejar el magnífico estado de salud que presenta el centro de la defensa rojiblanca, sector en el que el Athletic tiene sobrados motivos para abrazarse a la tranquilidad.

El trío Laporte-Yeray-Núñez, siempre que no se produzca fuga alguna, apunta no en vano a dar en los próximos años una marcada solidez a un equipo en el que los jóvenes continúan reivindicando sus figuras sin apenas necesitar tiempo de adaptación. Al igual que Córdoba, no lo ha requerido Núñez, que ha respondido de la mejor manera al reto de acompañar a Laporte en la zona central de una línea defensiva que luce músculo, juventud y poderío.