bilbao - La situación deportiva de Javier Eraso ha dado un giro de 180 grados en unos pocos meses. Olvidado entre el banquillo y la grada por Ernesto Valverde, que apenas le dio oportunidades la pasada campaña, el navarro está disfrutando nuevamente de su profesión en las filas del Leganés, club al que regresó en verano tras dos años en Bilbao. “Vuelvo a ser feliz, vuelvo a sentirme futbolista, a participar los fines de semana. No puedo pedir nada más”, desveló ayer en un acto con Goldenpark, uno de los patrocinadores del equipo pepinero. Además, añadió que “desde el primer momento la gente tenía muchas ganas de verme, yo notaba el cariño. Aquí la gentes es muy cariñosa con sus jugadores, se sienten identificados y apoyan mucho”. Su importancia en este arranque de temporada es evidente, pues ha sido titular en siete de los ocho encuentros disputados hasta la fecha y además ha marcado un gol.

Cuestionado por el que será un duelo especial para él, pues el domingo se medirá por primera vez al Athletic, Eraso no ocultó que “tengo una parte de mi corazón aquí y otra allí. Son los dos equipos en los que he jugado. Ahora mi cabeza está al cien por cien en el Leganés y mi corazón se vuelve pepinero. Voy a darlo todo por intentar sacar los tres puntos”.

En este sentido, el futbolista navarro apuntó que afrontan el choque ante los bilbainos “con mucha ilusión y con muchas ganas”. El Leganés es, en este inicio de curso, una de las sorpresas más gratas de la liga. No obstante suma 14 puntos en ocho jornadas, ocupa el sexto puesto y ha abierto una brecha de ocho puntos con respecto al descenso.

A pesar del buen arranque, el domingo el conjunto pepinero tendrá un duro reto. “Es otro nuevo reto para superar a un gran equipo. El equipo está en buena línea, en el buen camino. Tenemos un peso pesado enfrente y el equipo tiene que pelear como hasta ahora para ganar el partido”, apuntó Eraso. - A. M.