Andrija Zivkovic, el jugador más joven en ponerse el brazalete del Partizan

SU nombre no ocupa grandes portadas en los diarios de referencia en Europa, pero quienes le ven jugar cada fin de semana defienden que es cuestión de tiempo que lo haga. Rápido, habilidoso y capaz de marcar las diferencias en cualquier jugada gracias a su codiciada pierna izquierda, el joven Andrija Zivkovic (Nis, 1996) asoma como una de las grandes esperanzas del fútbol serbio. El Partizan, rival del Athletic esta tarde en Belgrado, se congratula por tenerle aún en sus filas, si bien es cierto que no podrá retenerlo durante mucho tiempo.

En junio, tras conducir a la selección sub’20 de su país a la conquista del primer título mundial de la categoría en Nueva Zelanda, las ofertas se amontonaron en torno a Zivkovic, autor del mejor gol del torneo. Pero el jugador, tras escuchar a su familia, optó por iniciar la temporada al abrigo del Partizan. Dónde la terminará, no obstante, es una incógnita tal y como confesó su padre, Jovica Zivkovic, después de rechazar en verano ofertas en firme de Benfica y Saint Etienne, así como propuestas de futuro procedentes de equipos de la liga como la Real Sociedad, Atlético de Madrid, Valencia, Sevilla o Celta. “Andrija se queda en el Partizan al cien por cien hasta enero y luego ya veremos qué pasa. Esta es una decisión familiar. Él tiene un contrato por un año más y no puedo decir lo que va a pasar después”, explicó el progenitor del capitán más joven en la historia del club serbio, que suma tres goles y una asistencia tras la disputa de las dos primeras jornadas de la fase de grupos de la Europa League.

El AZ Alkmaar y el Augsburgo, víctima en territorio alemán de un doblete del portador del dorsal 17 del Partizan, ya han probado el veneno de un futbolista que se apoderó del brazalete de capitán de su equipo con solo 17 años, siete meses y 18 días. Con la misma edad debutó también con la selección absoluta de Serbia, convirtiéndose así en el jugador más joven en alcanzar tal condición. Las estadísticas, no en vano, sonríen e iluminan a Zivkovic, que cumple su cuarta temporada en la elite tras incorporarse a la cantera del Partizan con solo 13 años. Desde entonces, al calor del club más famoso de su país, el joven extremo serbio ha quemado etapas a la velocidad de la luz.

En racha goleadora

A pesar de ser zurdo, su banda de acción es la derecha, posición desde la que acostumbra a arrancar con el objetivo de rebasar líneas mediante una inusitada facilidad para regatear y filtrar pases a la espalda de las defensas rivales. Su potente disparo desde media y larga distancia es otra de las cualidades que le definen como futbolista de inagotables recursos. En su debe, sin embargo, cabe destacar que aún es un jugador de momentos, pues no son pocos los partidos en los que pasan los minutos sin que logre entrar en contacto directo con el balón para mostrar su talento.

Esta tarde, en el Partizan Stadion de Belgrado, su sombra será Balenziaga, quien deberá vigilar de cerca al prometedor Zivkovic a fin de limitar su incidencia en el juego. El pasado domingo, en la decimocuarta jornada de la liga serbia, el joven centrocampista demostró estar en un óptimo estado de forma. Suyo fue, en el minuto 36, el gol del 3-1 ante el Javor, que mordió el polvo ante un Partizan liderado por su emergente estrella, que también figura como un auténtico especialista a balón parado. Sobrado de pretendientes y con un precio de compra que ronda los cinco millones de euros, el Athletic es el próximo gran objetivo de Zivkovic, decidido a comandar a sus compañeros hasta las rondas finales de una Europa League en la que ya se ha cobrado dos víctimas.