El 'pitbull' chileno

Conocido dentro de los terrenos de juego por su carácter indomable, la silueta del internacional chileno Gary Medel (Santiago, 1987) responde a una de esas que pueden presumir de ir más allá de la de un simple futbolista. "Tiene un carácter muy fuerte, pero lo más importante es que esté bien aquí con nosotros, ya que es parte de nuestra familia y siempre estamos a su lado", afirmaba el pasado mes de noviembre el croata Ivan Rakitic, compañero de fatigas en el Sevilla, una vez conocido el último pasaje en el que se había visto involucrado el irascible y enérgico centrocampista chileno.

Sucedió cuando Gary, que se encontraba ya dentro del avión que iba a dirigirle de vuelta a Sevilla tras su participación con la selección chilena, fue conducido al aeropuerto por la policía como consecuencia de una supuesta agresión con acusación incluida por parte de una periodista dedicada a la farándula. Y es que, a pesar de que la falta de lesiones presentada por la demandante hizo que el sevillista fuera puesto en libertad tras prestar la correspondiente declaración, lo cierto es que otros capítulos previos en la vida del jugador han contribuido a que en su Chile natal, su figura sea un constante reclamo para la prensa rosa y una continua diana para airear informaciones y rumores acerca de su controvertida vida privada.

Una realidad que persigue al sevillista en cada viaje que realiza a Chile y que comenzó a tomar cuerpo a la misma velocidad con la que el de Santiago iba creciendo como persona y futbolista. No en vano, aquel joven que llegó a afirmar sin pudor que "si no hubiera sido futbolista, habría sido narcotraficante", fue desarrollándose como jugador de fútbol en el Universidad de Chile (2006-09) a base de un insaciable pundonor mientras, fuera de las canchas, los incidentes no hacían sino multiplicarse en su vida personal. Así llegó la detención policial sufrida por agresión y desacato en Canadá durante el Mundial sub'20 de 2008; un accidente de coche en 2009 con cuatro vueltas de campana incluidas cuando, presuntamente, conducía bajo los efectos del alcohol; la caída al vacío de una joven de 18 años desde el balcón del apartamento del jugador en una de las fiestas organizadas por el propio Medel, diversas peleas en lugares públicos o la detención sufrida en junio del pasado año como consecuencia de unas supuestas amenazas de muerte a una persona a la entrada de un supermercado en la capital chilena, en Santiago. En definitiva, un largo historial de incidentes no todos achacables a su personalidad que, sin embargo, no han podido reducir ni limitar el impacto futbolístico de uno de los pesos pesados tanto en el Sevilla -club en el que aterrizó en enero de 2011 por tres millones de euros, procedente de Boca Juniors- como en la selección chilena, con la que participó en el Mundial de 2010.

elogios de bielsa Fue precisamente en el combinado chileno donde, tras haber contado también con la opinión positiva de Marcelo Bielsa de cara a su incorporación a Boca Juniors en 2009, Gary Medel conoció de primera mano al actual inquilino del banquillo del Athletic. Una buena relación entre ambos basada en el respeto mutuo, que no se vio afectada por el delicado historial del jugador, que siempre ha mostrado su admiración por el "profesor" Bielsa, y a quien el rosarino convirtió en uno de sus hombres de confianza destacando su "hambre" por recuperar cada balón en disputa.

Una característica intrínseca a su persona que Medel, segundo máximo goleador del Sevilla en lo que va de Liga con seis tantos -el chileno está respondiendo con goles a la libertad que le ha otorgado Emery para poder sumarse a jugadas ofensivas-, aún conserva para tratar de volcar sobre el césped un insaciable ardor guerrero que le ha servido para ser conocido como el pitbull chileno. Un auténtico perro de presa que volverá a comandar mañana la aguerrida medular de Unai Emery.